El Gobierno de Pedro Sánchez aprobó el 14 de marzo el estado de alarma para hacer frente a la pandemia del Coronavirus, pero dentro de este decreto se están adaptando las medidas a la propia evolución de la pandemia, y tras la suspensión de las actividades económicas no esenciales, el 29 de marzo, ahora se vuelven a permitir algunos trabajos pero vuelve la incertidumbre sobre qué se puede hacer y qué no se puede hacer.
La vuelta a la normalidad de algunas actividades económicas no significa el fin del confinamiento, que ahora cumple un mes y que se alargará hasta el 26 de abril, si el Gobierno no aplica una nueva prórroga del estado de alarma.
Lo que se puede hacer
Pueden volver a la normalidad las actividades económicas no esenciales que habían sido prohibidas desde el 29 de marzo ante el alarmante aumento de contagios y fallecidos. Ahora que la situación ha mejorado se permite la vuelta al trabajo a cuatro millones de personas del sector industrial y la construcción.
Las personas que presenten síntomas, por leves que sea, como fiebre, tos y dificultades para respirar, y que hayan estado en contacto con enfermos por Covid-19, deberán solicitar la baja médica por teléfono según han informado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y el ministro de Justicia, Fernando Grande-Marlaska. También están exentos de trabajar las personas en riesgo, ya sea por edad o por ser enfermos crónicos, y las embarazadas.
En las tiendas se mantiene la normativa sobre la limitación del aforo, y en las empresas habrá que escalar los turnos para garantizar la distancia mínima entre los trabajadores. En el plan del Gobierno se contemplan también medidas de higiene y el uso recomendado de mascarillas, de las que se repartirán 10 millones de unidades entre el lunes y el martes en el transporte público.
Se siguen permitiendo los trayectos cortos para comprar alimentos, medicamentos y productos de primera necesidad, para ira a un centro médico, para cuidar a una personas mayores, menores, dependientes o con discapacidad, para visitar entidades financieras o aseguradoras, y salidas por causa de fuerza mayor.
Estarán abiertas las farmacias, las ópticas, los quioscos de prensa, los estancos, las gasolineras y las tiendas de alimentos para mascotas y clínicas veterinarias. También se puede seguir paseando a las mascotas, siempre que se haga con responsabilidad.
Lo que no se puede hacer
Dentro de las actividades no esenciales que pueden volver a la normalidad hay excepciones. El Gobierno ha matizado que en el sector de la construcción se mantiene la suspensión de las obras que se realicen dentro de un espacio en un edificio con presencia de inquilinos y personas ajenas a la obra, siempre que no sean emergencias y averías.
El Gobierno ha insistido en que no estamos en fase de desescalada del confinamiento y que, al margen de las actividades económicas no esenciales, se mantiene el resto de las restricciones. Estos días se ha hablado mucho de la posibilidad de que los niños puedan salir a la calle, pero de momento siguen teniendo prohibido salir a no se que se queden solos en casa.
Sigue la prohibición de salir a pasear o hacer ejercicio, y los gimnasios permanecerán cerrados por ahora. Tampoco se puede llevar a alguien en coche al trabajo, ni visitar a familiares y amigos, ni salir a comprar ropa ni comer fuera, aunque se puede pedir a domicilio.
Algunos trámites, como la declaración de la renta, no han variado su plazo, pero en cambio siguen suspendidos los juicios y ciertos trámites administrativos como la renovación del DNI. Incumplir las normas y realizar alguna de las actividades no permitidas conlleva una sanción entre los 601 y los 600.000 euros o penas de prisión entre uno a tres años en caso de desobediencia grave.