Jorge Carrillo Borrego

Jorge, el ciclista español de 42 años fallecido a pocos metros de llegar a la meta

Sus amigos no le vieron llegar y alertaron a los equipos de emergencias, que lo encontraron muerto poco después

El ciclismo español se vuelve a vestir de luto tras conocerse la muerte de un corredor de solo 42 años. Jorge Carrillo Borrego falleció ayer mientras participaba en una prueba de bici de montaña en Lucena (Córdoba). La policía ha abierto una investigación para esclarecer el origen de su fallecimiento.

La muerte de Jorge se ha producido durante la 26 Ruta MTB Ciudad de Lucena. Se trata de una carrera de 50,5 kilómetros en bici por diferentes parajes naturales de la ciudad. Al mediodía de ayer, durante la competición, los servicios de emergencia recibieron un aviso por la desaparición de un ciclista.

Según informa Diario de Córdoba, una llamada al 112 a las 14.40 horas advertía de que un ciclista no había cruzado la meta al finalizar la carrera. Había sido visto por última vez en la carretera CO-6218 a la altura del cementerio de San Jorge. Fue allí donde lo encontraron poco después.

Efectivos de Guardia Civil, Policía Local, Protección Civil y servicios sanitarios se desplazaron hasta el lugar del hallazgo del cadáver. Los sanitarios confirmaron la muerte del ciclista y la Guardia Civil procedió al levantamiento del cadáver. Por ahora, se desconocen las causas de la muerte del hombre.

A la espera de los resultados de la autopsia

Los restos mortales del ciclista fallecido fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal de Córdoba. La policía espera ahora los resultados de la autopsia, que determinarán si se trata de una muerte natural o fue víctima de un accidente. Por ahora, no han revelado si existe una hipótesis principal.

La policía aguarda con máxima prudencia los resultados del análisis forense, y no quiere revelar ninguna pista. Según publica la prensa local cordobesa, Jorge era nieto de un conocido empresario del bronce en Lucena, Antonio Carrillo Cuadra. Su familia es muy conocida y apreciada en la ciudad cordobesa.

Por eso, su muerte ha caído como un jarro de agua fría y ha causado una gran consternación. Jorge creció en la calle Jiménez de Illescas, en el barrio de Los Olivares. Allí vivió durante muchos años junto a sus padres, Antonio Carrillo y María Borrego, y sus tres hermanos.

Gran aficionado al deporte

La muerte de Jorge ha sorprendido por su edad y por su condición física. Era un hombre joven, de apenas 42 años, gran aficionado al deporte y que llevaba una vida sana y sin excesos. Era soltero y solía practicar la bici de montaña con un grupo de amigos que viven el suceso sumidos en el dolor.

Esos amigos le esperaban ayer a la meta, pero al ver que no llegaba dieron la voz de alerta al centro de emergencias. Ellos mismos le buscaron haciendo el recorrido de la carrera con sus motos, y preguntando en todos los puntos de avituallamiento. Poco podían esperar el trágico desenlace de su amigo.

Encontraron a Jorge a unos 40 metros del recorrido oficial, en las inmediaciones de la carretera del nuevo cementerio. La organización se hizo eco del trágico accidente apenas conocida la noticia. Su muerte se difundió rápidamente ante la consternación de aquellos que le conocían.

Día negro en Lucena

La noticia de la muerte de Jorge quedó eclipsada por otro suceso luctuoso en la ciudad de Lucena. Un niño de 4 años murió ayer tras ser mordido por un perro en la localidad cordobesa. El menor fue atacado en su habitación, de madrugada, en el cortijo que guardaban sus padres.

El pequeño fue trasladado al centro de salud con heridas muy graves, y los médicos solo pudieron certificar su muerte. Presentaba profundos cortes en el cuello y varias partes de su cuerpo. Ingresó sin vida en el hospital, y su cuerpo fue trasladado al Instituto Anatómico Forense de Córdoba.