España parece que por fin ha conseguido uno de sus objetivos en su estrategia de vacunación contra la covid-19 que es alcanzar un ritmo de crucero. Son ya varios los días en que se han superado las 500.000 dosis puestas en tan solo 24 horas y se vienen cumpliendo los objetivos marcados, por el Gobierno, como por ejemplo que hubiera 5.000.000 de inmunizados en España la primera semana de mayo.
La realidad es que las cifras no engañan. España ha recibido 21.100.665 dosis con las que ya se ha podido vacunar con una primera dosis a 13.797.431 españoles, de los cuales 6.221.476 ya tienen la pauta completa y están protegidos, siempre que haya pasado el tiempo estimado por los distintos fabricantes. Tan buenas son las noticias recibidas que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se atrevía este lunes a iniciar una cuenta atrás para llegar al tan ansiado 70% de población vacunada, que implica alcanzar la inmunidad de rebaño.
Esta aceleración en el ritmo de vacunación ha permitido que desde el ministerio de Sanidad se vaya ampliando ya a otros sectores de población que hasta ahora no eran prioritarios. Y en muchos de ellos se ha concretado que van a recibir la vacuna monodosis, la de la farmacéutica americana Janssen, después de que hasta ahora haya sido utilizada por las diferentes comunidades autónomas para las personas que tienen entre 70 y 79 años.
En un principio, los siguientes que van a ser inmunizados con esta vacuna van a ser personas menores de 60 años, priorizando de momento a aquellos que tengan entre 50 y 59 años. Aunque no es una decisión definitiva, no parece que vaya a haber problemas para que este martes se apruebe en la Comisión de salud pública, donde están representados técnicos del ministerio de Sanidad y de las comunidades, tras analizarla.
A la vez de las personas de esta edad, también se incluirían otros colectivos vulnerables sin tener en cuenta su rango de edad. De momento, los que siguen sin incluirse en la estrategia de vacunación son aquellos menores de 60 que han recibido la primera dosis de AstraZeneca, cuya solución a su problema debería llegar a finales de mayo, cuando lo decida la misma comisión médica.
Por qué se ha escogido estos colectivos
El texto, como decíamos, concreta como está vacuna empezó a ponerse en los mayores de 70 y como ahora se utilizará en otros sectores sea cual sea su edad. Y lo que quiere Sanidad es aprovechar las ventajas que aporta esta vacuna al ser de una sola dosis.
Afirman que esta condición de esta vacuna permite mejorar «su utilización desde el punto de vista de factibilidad y eficiencia de los recursos sanitarios en ciertos colectivos difíciles de captar y vacunar». Y el texto distingue a tres sectores concretos en este sentido: aquellos que no acuden al sistema sanitario, en los que hay necesidad de desplazamiento de personal a los domicilios particulares o colectivos que difícilmente pueden acudir en el tiempo establecido para completar su pauta. En estos se empezará a poder administrar la vacuna de Janssen a partir de los 18 años.
Estos colectivos más óptimos para ser vacunados con Janssen son en aquellos que se consideran más vulnerables social y económicamente y que es más difícil que vayan al sistema sanitario. Hablamos de personas sin hogar, de muchos trabajadores temporeros del sector hortofrutícola o los inmigrantes que se encuentran en una situación irregular.
También se destinará a aquellas personas difíciles de vacunar o que no se pueden desplazar. Se refiere este punto a grandes dependientes, personas con autismo o enfermedad mental con mucha agitación. A su vez también se destinará a personas difíciles de captar como los internos en centros o tutelados o para quien sea difícil planificar una segunda dosis, trabajadores del mar, cooperantes en países de riesgo o personas que se vayan a ir fuera de España por su actividad laboral.