Los días pasan y sigue sin haber novedades sustanciales respecto al caso de la búsqueda de Anna y Tomás Gimeno. Lo único en lo que se está insistiendo es en registrar de forma exhaustiva la casa donde vivía el empresario tinerfeño con su novia. Hoy en día, se vuelve a poner el foco en el domicilio del presunto asesino, al que la Guardia Civil ha acudido por sexta vez.
Desde 'El programa de Ana Rosa' se sigue informando a pie de calle en Candelaria. El espacio de Telecinco refleja cada día la angustia que se vive en esa zona de Tenerife, mientras los agentes continúan la búsqueda.
La Guardia Civil trabaja sin demora para dar con el cuerpo de Tomás Gimeno en el océano. El caso es que si, finalmente, no lograse encontrarse el cuerpo del empresario, el homicidio no quedaría archivado hasta dentro de 20 años. Una búsqueda que sigue su curso, pero cada vez con menos opciones de resultar exitosa.
Lo que más desea la madre de Anna y Olivia, Beatriz Zimmermann, es que ambos cuerpos aparezcan. Así, podrá cerrar el círculo del profundo dolor en el que está inmersa desde hace varias semanas.
Novedades tras el sexto registro en la casa del presunto asesino
La reportera desplazada a Canarias apunta desde Candelaria que en el sexto registro «los agentes han buscado pastillas, sedantes, algún bote donde pudiese haber algo y no han podido encontrar nada». La redactora de 'El programa de Ana Rosa' desvela que la búsqueda dentro de la casa del padre de las niñas ha durado dos horas.
Por otra parte, la casa de Tomás aporta un gran interés porque «fue el último lugar en el que las niñas estuvieron con vida». La periodista cuenta que «todo apunta a que esa búsqueda se habría producido porque los forenses podrían haber detectado algo en el cuerpo de Olivia».
«Ese registro forma parte de las diligencias previas de la reconstrucción de las horas o minutos previos a los que Tomás mató a las niñas. Con ello, puede comprobarse si las intoxicó», expone la reportera desde Candelaria.
Mientras, la madre de las niñas agradece el trabajo del Ángeles Alvariño
En otro orden de cosas, Beatriz Zimmermann, la madre de Anna y Olivia, ha tenido un gesto que le honra en las últimas horas. La mujer ha escrito una carta con un claro destinatario: la tripulación del buque Ángeles Alvariño. Así, la mujer les ha agradecido su labor constante en aras de encontrar a sus hijas, de uno y seis años de edad, respectivamente.
En la carta, Beatriz afirma que «quería ir al barco a agradecer toda la labor que están haciendo, pero me dijeron que era peligroso por lo que les escribo una carta».
A su vez, la exmujer del empresario tinerfeño no se olvida de la Guardia Civil. «Junto al magnífico trabajo de la Guardia Civil han hecho que la verdad salga a la luz. Por muy devastadora y cruel que fuera, siempre es mejor saber la verdad», confiesa.
«Gracias a ustedes (cuando digo ustedes, a la Guardia Civil también, claro), puedo sentir a mis niñas conmigo, pero las puedo sentir a mi lado», asegura la madre de las pequeñas.
La madre de Anna y Olivia asegura lo siguiente a la tripulación del buque si ellos no hubieran encontrado a Olivia. «Yo nunca habría parado de buscar. Gracias a ustedes puedo vivir y poco a poco sumida en la tristeza, pero en la paz y en el amor de saber que sabemos la verdad».
«No solo yo, todo el mundo que también lo está sufriendo y esto es algo que nunca se supera, se aprende a vivir con ello. Si no la hubieran encontrado, yo nunca habría parado de buscar. Mi única meta habría sido encontrarlas, buscarlas, cuando realmente desde el 27 de abril ya no están físicamente aquí», concluye su carta.