El Instituto de Educación Secundaria Monte Naranco de Oviedo se ha visto sacudido esta mañana por la tragedia. El conserje del colegio, un hombre de 62 años, ha muerto en un fatídico accidente mientras intentaba recuperar unas llaves que se habían extraviado por el hueco del ascensor.
El incidente ha ocurrido esta mañana en el colegio asturiano. Según las primeras noticias, el hombre estaba intentando recuperar unas llaves que habían caído por el hueco del ascensor. De pronto, el aparato se puso en funcionamiento y la víctima quedó atrapada muriendo en el acto. Hasta el lugar del suceso se han trasladado efectivos de la Policía Nacional y varias ambulancias.
En el momento del accidente, sobre las 9 de la mañana, los alumnos de la escuela estaban en el aula atendiendo las clases. Han sido los compañeros del conserje los que han dado la voz de alarma a los servicios de emergencia, que se han desplazado hasta el lugar pero que no han podido salvar la vida de esa persona.
Los profesores y trabajadores del centro están consternados por el suceso. La reacción inicial ha sido de mantener a los alumnos dentro de las aulas para evitar que viesen la escena. Finalmente, y con ayuda de los efectivos policiales y de seguridad, el centro ha sido desalojado y se han suspendido las clases.
La noticia ha causado una gran consternación también en las autoridades locales y toda la comunidad educativa asturiana, así como en la opinión pública en general. Sin ir más lejos, el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, se ha acercado hasta el lugar del accidente junto al concejal de Seguridad Ciudadana, José Ramón Prado, y el jefe de la Policía Local de Oviedo. Allí ha acudido también la familia de la víctima.
Un accidente similar con pocas horas de diferencia
La tragedia se ha cernido esta mañana sobre el instituto asturiano, pero no es el único incidente de estas características en las últimas horas en España. Ayer por la mañana, un trabajador del mantenimiento de ascensores murió al quedar atrapado en un elevador que estaba reparando, en un complejo hotelero de Rota, Cádiz.
Luego trascendió la identidad del fallecido. Se trata de Pedro Garrido, un hombre de 48 años que trabajaba en el sector de los ascensores desde hacía unos diez años, y que además era el presidente del club de fútbol Jerez Industrial. Era una personas muy conocida y querida en Jerez de la Frontera, de donde era natural, y su muerte causó una gran conmoción.
En el caso de la muerte de Pedro Garrido, se abrió una investigación para esclarecer las causas del incidente, producido ayer poco antes del mediodía. El hombre quedó atrapado en una cabina del complejo hotelero mientras trabajaba, y un compañero dio la voz de alarma a los servicios de emergencia. Finalmente, murió.
Seguridad en los ascensores
Todos los años muere gente en los ascensores de casa o del trabajo. A veces se debe al mal mantenimiento, y otros a imprudencias del propio usuario. Intentar salir de la cabina durante una avería o dar un paso en falso al entrar en el ascensor son descuidos que pueden ocasionar accidentes fatales.
Los bomberos y los expertos en estos aparatos recomiendan, ante una avería, mantener la calma y no tomar decisiones precipitadas. Si se trata de una avería importante, no hay que intentar salir del elevador si está entre dos pisos, porque hay riesgo de caer por el hueco o quedar atrapado si el ascensor se pone en marcha.
Lo mejor es llamar a la empresa de mantenimiento: hoy en día, muchos ascensores ya tienen teléfono incorporado. No hay que aceptar la ayuda de un vecino para abrir la puerta, en especial si se ha quedado clavado entre dos pisos. Hay que esperar a que los expertos hagan su trabajo, y salir con su ayuda.
Una de las cosas más peligrosas es poner el cuerpo entre el exterior y el interior del ascensor, porque si se pone en marcha hay riesgo de quedar aplastado. Si caen cosas por el agujero no hay que intentar recuperarlas por cuenta propia: lo mejor es ponerse en contacto con la comunidad de vecinos y llamar a los técnicos para acceder al objeto.