El coronavirus no ha llegado a su fin. El relajamiento de las restricciones por la pandemia nos permite desconectar de la presencia del virus, pero no implica que la COVID-19 haya desaparecido.
El Ministerio de Sanidad registró el pasado viernes un total de 55.578 nuevos casos de coronavirus, 25.629 de ellos en personas mayores de 60 años. Y con estos datos, se eleva a 12.009.059 la cifra total de contagios en España desde que se inició la pandemia.
La nueva estrategia de vigilancia y control frente al coronavirus pasa factura
Gracias a los buenos datos de vacunación y la inmunidad generada a partir de infecciones naturales, fue posible llevar a cabo una nueva estrategia de vigilancia y control frente al coronavirus.
Así pues, se lanzó una nueva estrategia al considerar que la mayoría de la población ya está protegida contra cuadros de sintomatología graves de coronavirus. Sin embargo, todavía hay determinados sectores de la población que siguen siendo vulnerables a desarrollar cuadros graves de coronavirus.
Es el caso de las personas de edad avanzada, las personas con enfermedades subyacentes graves y los inmunodeprimidos que no hayan desarrollado una protección suficiente contra el SARS-CoV-2.
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Ni cuarentenas, ni mascarillas, ni pruebas diagnósticas generalizadas
Poner punto y final a los aislamientos de los casos leves y asintomáticos fue la medida estrella de este nuevo plan estratégico. Además, tampoco se iban a llevar a cabo más pruebas diagnósticas generalizadas.
Como los síntomas de coronavirus han ido pareciéndose cada vez más a los de la gripe o un simple catarro, se decidió que los positivos ya no estén siete días aislados. Sin embargo, sí que se les recomienda guardar reposo y teletrabajar, siempre que sea posible. Además, deberán llevar puesta la mascarilla siempre que salgan de casa y evitar al máximo los contactos sociales, especialmente con personas más vulnerables.
A todo esto se le suma que hace ya casi tres semanas que la mascarilla en espacios interiores dejó de ser obligatoria en España. Solo siguen siendo necesarias en centros sanitarios, sociosanitarios y en servicios y establecimientos sanitarios, tanto para trabajadores como para visitantes. Y también en transporte aéreo, ferrocarril, cable, autobuses y en los transportes públicos de viajeros.
La incidencia acumulada sube en España
A raíz de todas estas medidas, la incidencia acumulada en España ha ido creciendo en las últimas jornadas, especialmente desde Semana Santa. Por lo que algunos expertos ya han avisado de lo que podría llegar próximamente.
El epidemiólogo y exdirectivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Daniel López, ha avisado sobre esta situación. En este sentido, el experto ha pedido una rectificación a las autoridades sanitarias sobre sus decisiones recientes, tras el “notable” aumento de la incidencia, lo que él considera ya que es una séptima ola.
Daniel López considera que “no aislar a los positivos asintomáticos y reducir el número de pruebas” es uno de los factores que explica este incremento de la incidencia, pero no es el único. También destaca que “se relajó la guardia en cuanto a las mascarillas en exteriores cuando no se podía guardar la distancia física, como en las aglomeraciones de Semana Santa”, según recoge La mañana de Andalucía.
El experto considera que se han dado “pasos equivocados”. Por lo que, desde su punto de vista, “es importante reconsiderar el uso de las mascarillas en interiores, aislar a los positivos asintomáticos y que se hagan más pruebas”.
La séptima ola está al caer en España, según el exdirectivo de la OMS
Con todos los datos sobre la mesa, Daniel López no tiene dudas de que estamos entrando en una séptima ola de contagios. Aunque expone que “es difícil establecer comparaciones porque ahora no estamos midiendo igual la pandemia”.
Y es que el experto considera que el repunte se está dando de una forma muy rápida, con incrementos de entre el 40% y el 60%, comportándose así como una nueva ola.
“Desde comienzos de abril a principios de mayo hay un 47% más de incidencia y un 53% más de hospitalizaciones en mayores de 60 años”, recalca López.