Seguramente lo que no deseaban los agentes que accedieron a una vivienda de O Seixo, en el municipio coruñés de Mugardos, era que se confirmarán sus peores temores. Allí, encontraron el cuerpo sin vida de una mujer de 59 años que presentaba signos evidentes de llevar mucho tiempo fallecida.
Pero lo que resulta sorprendente de este caso, es que la iniciativa para entrar en la casa no se produjo porque algún vecino o familiar la echara en falta. Fue la propia Policía Local de Mugardos la que dio el paso después de que les fuera imposible contactar con ella durante meses.
Y es que lo que llevó a los agentes a plantearse que la mujer podría estar desaparecida o haber fallecido fue un simple problema burocrático que empezó en 2019. Fue ese año cuando la Policía Local se vio obligada a retirar el vehículo de la fallecida, un Ford Fiesta según recogía 'enfoques.gal', ya que estaba aparcado en una zona donde se iban a realizar unas obras.
El vehículo fue trasladado al depósito, como marca la rutina habitual, a la espera de que fuera reclamado. Pero la dueña, ni se personó en el mismo y tampoco se puso en contacto en los días o meses siguientes para comprobar si su coche se encontraba allí.
La propia policía acabó abriendo una investigación
Con el paso de los meses, viendo que el vehículo seguía allí abandonado, la Policía Local de Mugardos empezó a abrir una investigación para ver que si le podía haber pasado algo a la dueña. En ella, contaron con la colaboración de la Guardia Civil.
Se intentó contactar con ella de todas las maneras posibles pero sin éxito. No contestaba a las llamadas telefónicas que se le realizaron y tampoco parecía recoger los envíos postales que se le realizaron. Los agentes intentaron esclarecer con los vecinos si habían notado algo raro o si podían tener alguna pista sobre el paradero de la mujer.
Pero viendo que estas indagaciones no daban su fruto, finalmente se decidió dar un paso más allá y pedir permiso a los familiares para acceder a la vivienda. Y es que la mujer contaba con hermanos e hijos, aunque no consta que se hubiera presentado ninguna denuncia de su desaparición durante todo este tiempo.
Finalmente, el paso definitivo para intentar localizar a la mujer lo darían este miércoles por la tarde. Los agentes entraban en la vivienda de la avenida O Seixo de Mugardos y se encontraban con el cadáver de A.F.D., que habría cumplido 59 años este mes de febrero, en una de las habitaciones de su casa.
Fuentes policiales habrían confirmado que el cuerpo fue encontrado prácticamente momificado y sin que apenas se hubiera descompuesto. Esto podría haber ayudado a que no hubiera desprendido un fuerte olor que hubiera alertado a los vecinos.
Tras el hallazgo del cuerpo sin vida de la mujer de 59 años, este fue trasladado al Hospital Juan Cardona debido a su estado. Se espera que sea allí donde se le realice la autopsia que pueda determinar las posibles causas de la muerte y que permita cerrar la investigación.
Pese a la extrañeza de este caso, la realidad es que no es la primera vez que se encuentra a una persona en su casa que llevaba varios años fallecida. Hace apenas unas semanas, se daba a conocer el caso de un hombre en la localidad mallorquina de Cala Major, que fue encontrado en el sofá de su casa, rodeado de basura, y que podría llevar muerto unos 5 años, tiempo que tardaron los vecinos en preocuparse por él.