La Policía Nacional está investigando la extraña muerte de un bebé de solo 18 meses en el hospital Materno Infantil de la ciudad de Málaga. Según ha explicado 'Diario Sur', la madre del pequeño fue quien llevó a su hijo, que presentaba un golpe en la cabeza, al servicio de Urgencias del hospital.
Una vez allí, el centro médico activó el protocolo ante las sospechas de un posible maltrato al menor, lo que llevó a que la mujer fuese detenida por agentes de la Policía. La madre del bebé permanecerá bajo custodia policial, por lo menos, hasta que estén los resultados de la autopsia que se realizó al menor, que terminó falleciendo en el hospital a causa del golpe. Está previsto que los resultados de la autopsia se conozcan hoy.
'Málaga Hoy' ha informado que la madre, aunque trasladó a su hijo al servicio de Urgencias, lo hizo tarde, por lo que los médicos poco pudieron hacer para salvarle la vida. De hecho, las mismas fuentes aseguran que el bebé ya había fallecido cuando los sanitarios fueron a asistirlo. En ese momento se activó la comisión judicial para levantar el cadáver y se dio aviso a la Policía, que abrió una investigación por las heridas que la víctima presentaba en la cabeza.
Los pediatras que atendieron a la víctima y el forense que realizó el levantamiento del cadáver detectaron, además del golpe en la cabeza, otros hematomas que el pequeño tenía por el cuerpo, todos ellos en diferente estado de evolución, lo que podría significar que el bebé fue víctima de agresiones y golpes en diferentes ocasiones. Estos indicios llevaron a activar el protocolo del hospital ante un posible caso de maltrato a menores.
Muere un bebé en Barcelona por presuntos malos tratos de su madre
El de Málaga es el segundo caso que se hace público en la última semana sobre un suceso de estas características. El pasado jueves, 19 de noviembre, se conoció la muerte de otro bebé de solamente un mes de vida que llevaba prácticamente todo ese tiempo ingresado en el hospital, primero en un hospital de Lleida y luego en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, donde fue trasladado por la gravedad de su estado.
Fue en el centro sanitario de Barcelona donde los médicos se dieron cuenta de que el bebé podría haber sufrido malos tratos por parte de sus padres. Tras su ingreso y la valoración inicial de su estado, los médicos se dieron cuenta de que el bebé presentaba síntomas compatibles con el llamado síndrome del bebé sacudido, es decir, un traumatismo craneal.
La tardanza en el diagnóstico se produjo porque el bebé no presentaba ninguna lesión física ni signos visuales que indicaran que había podido ser víctima de malos tratos, pero una vez se le hizo una revisión más a fondo, los médicos detectaron lesiones cerebrales que sí que podían encajar con un posible zarandeo del bebé de forma brusca y violenta, especialmente teniendo solamente un mes de vida.
La madre del bebé es la principal sospechosa de estos malos tratos, una joven de 18 años que está siendo investigada por la Policía, pero está en libertad condicional y con la obligación de presentarse cada 15 días en el juzgado. El padre de la víctima, que también ha declarado ante el juez, no está siendo investigado porque se encontraba fuera de casa, trabajando, cuando sucedieron los hechos.
Ninguno de los padres tenía la custodia del niño en el momento de su muerte, ya que el juzgado les retiró la custodia tras ser ingresado y su tutela quedó en manos de la Dirección General de Atención a la Infancia y Adolescencia.