Siguen pasando los meses de pandemia, pero los comportamientos totalmente incívicos e irresponsables se siguen repitiendo en nuestro país. Cada fin de semana siguen siendo decenas las fiestas ilegales o botellones que se producen en España y son centenares las multas que imponen los distintos cuerpos policiales. Pero es que ya no es que sigan cometiendo este tipo de actos ilegales por las ganas de tener ocio nocturno, sino que se producen en todo tipo de celebraciones como puede ser una pedida de mano.
Solo hay que ver el evento en el que tuvo que intervenir hace unos días la Policía Local de Málaga. Acudieron a una nave de un polígono industrial después de que algunos agentes detectaran movimientos extraños y se acabaron encontrando con una pedida de mano con más de cien personas y en la que no se respetaba ninguna medida de seguridad. Un episodio similar al denunciado hace unos días en un taller de lápidas de Madrid.
Todo paso sobre el pasado 15 de marzo sobre las siete y media de la tarde, según recogía el diario 'SUR'. Fue sobre esa hora cuando una patrulla vio salir del local a cuatro personas con claras señales de estar bajo los efectos del local situado en el polígono El Viso de la capital malagueña.
Ante las sospechas de que se estuviera produciendo algún tipo de fiesta local, se preparó un dispositivo conjunto entre el Grupo Operativo de Apoyo (GOA) de la Policía Local de Málaga y la Policía Nacional. Nada más acercarse escucharon mucho ruido desde dentro y vieron a más gente salir de dentro de la nave industrial.
Viendo esta situación, los agentes decidieron llamar a la puerta de la nave industrial, para comprobar que es lo que estaba ocurriendo dentro. De manera inmediata, se hizo el silencio dentro del local y un hombre salió por la puerta. Según explican fuentes policiales, este les habría indicado que había alquilado la nave para celebrar una pedida de mano y que todas las personas que se encontraban en su interior eran miembros de una misma familia.
Pero, claro, una vez dentro los agentes comprobaron que la celebración incumplía todo lo establecido en las normas de protección contra la pandemia. En el local no se respetaba la distancia de seguridad, pues contabilizaron hasta 104 personas cuando con la actual reglamentación el aforo máximo que debería haber habido es de 68.
Aunque esta no es la única norma que se incumplía en el local. Dentro la gente, cantaba y bailaba sin respetar tampoco la distancia de 1,5 metros y muchos de ellos lo hacían sin mascarilla. Es por eso que se tomó la decisión de desalojar el local, además de imponer las correspondientes sanciones por no cumplir las normas sanitarias a los asistentes a la celebración, al organizador de la fiesta y al arrendador.
210315 - Policía Local Málaga - COVID-19 - Local reincidente denunciado celebra pedida de mano
No es la primera vez que detectan una fiesta en el local
Y otra gran responsabilidad con la que se encuentran los agentes es que ese local industrial de Málaga era reincidente. Solo habían pasado unos días desde que habían hecho otra intervención similar por una fiesta donde no se cumplían las normas sanitarias actuales que en esta ocasión había sido convocada a través de las redes sociales.
Los agentes que acudieron a la zona en esa ocasión volvieron a detectar música a todo volumen desde dentro de la nave y a un hombre que controlaba la puerta. Este era el encargado del local al que le pidieron poder entrar en el mismo. Una vez dentro se encontraron a más de 30 personas, hasta 10 diez de ellas sin mascarillas y dos de ellas saltándose el cierre perimetral por provincias vigente en Andalucía.