«El próximo curso comenzará en septiembre», así anunciaba Pedro Sánchez la vuelta al colegio de los alumnos después de que las clases fueran suspendidas el pasado mes de marzo como consecuencia de la crisis sanitaria provocada por el Covid-19. Desde entonces millones de alumnos y profesorado tuvieron que recurrir a las tecnologías para dar la formación de forma telemática.
A tenor del anuncio del Presidente del Gobierno del inicio del curso escolar 2020-2021, la ministra de Educación, Isabel Celaá, dio un paso al frente y comentó cómo sería esa vuelta a los centros educativos dejando claro que, hasta que no haya una vacuna contra el virus, el regreso a las aulas estará sometido a grandes cambios.
El objetivo principal es evitar un rebrote que dé al traste con todo lo realizado hasta ahora y por ello la distancia de seguridad será lo principal a tener en cuenta, una medida muy complicada de garantizar que requería medidas especiales.
«Si todos los niños acuden a la vez no podremos salvaguardar la distancia obligada» señala la ministra asegurando que el Ejecutivo ya trabaja para concretar la forma en que las aulas se abrirán de cara al nuevo curso y donde suena con fuerza la limitación de alumnos por clase cuyo número no podrá ser superior a 15. Como no hay recursos suficientes para duplicar los grupos, se baraja la opción de una educación mixta donde parte del alumnado hará clases presenciales y otros de forma telemática.
Un cambio que afectará a las familias que deberán buscar el modo de conciliación familiar y una nueva dinámica de enseñanza por parte del profesorado que, a diferencia del cierre precipitado de las aulas en marzo, ahora tendrán tiempo de adecuar la docencia vía on line.
Además de la reducción del número de alumnos y la distancia de seguridad, los centros también deberán contar con geles desinfectantes que deberán ser utilizados tanto a la entrada como a la salida del centro, posible uso de mascarillas y turnos a la hora del comedor. El momento de entrada al centro y la salida deberá hacerse escalonada para evitar aglomeraciones de familiares.
«Las medidas de prevención sanitaria se van a colar el curso que viene en las rutinas, normas y dinámicas de los centros y van a tener un impacto en la práctica pedagógica y educativa» opina la directora de Educación y Formación de la Fundación Cotec, Ainara Zubillaga.
A falta de un reglamento completo por parte del Gobierno, todo apunta a que el próximo curso 2020-2021 marcará, sin lugar a dudas, una nueva forma de educación.