Es una realidad que esta actual crisis de la covid-19 ha afectado de lleno a prácticamente todos los sectores económicos y productivos del panorama español, sobre todo ha incidido con mayor fuerza a la hostelería y al turismo.
Son muchas las empresas que se han visto obligadas a enviar aparte o al total de su plantilla de trabajadores a un ERTE para poder sobrellevar de la mejor manera posible los desencadenantes de esta situación tan extrema económicamente.
El Servicio Público de Empleo Estatal, también conocido como SEPE, no dispone en estos momentos los medios necesarios para superar la caída de su sistema informático sufrida en esta última semana. Una consecuencia que ha causado la decepción y la indignación por parte de los trabajadores, quienes afirman que el pago de las prestaciones y subsidios tramitados desde el pasado 9 de marzo se verá directamente afectado en el próximo mes de abril, una vez se vuelvan a ejecutar.
Por su parte, dicho organismo trabaja para lograr la normalidad y recuperar los terminales afectados ante el ataque informático que paralizó su actividad.
Un ciberataque que ha causado un tapón considerable en las gestiones
El desencadenante, calificado por ser un ciberataque, ha causado colas de espera en torno a las tramitaciones que no han podido desarrollarse, ya que no se puede acceder al sistema, puesto que los terminales del organismo han quedado encriptados. Fuentes de este organismo del Trabajo explicaron que por el momento no existe una cifra concreta del número de expedientes afectados por esta situación, pero sí que estiman que será inviable el recuperar el ritmo común para llegar a tiempo para el pago de la próxima nómina, que se cierra el próximo 31 de marzo.
En esta misma línea, en el mes de enero, dicho organismo incrementó notoriamente en 77.272 personas el número de beneficiarios reconocidos para el cobro de prestaciones económicas contributivas y asistenciales. En ese mismo mes, la cantidad total cuantificada de beneficiarios se elevaba a 2,74 millones de personas, a las cuales se le tendría que añadir los cerca de 900.000 trabajadores que se mantienen hasta el momento en ERTE y que perciben por medio del organismo el 70% de su base reguladora.
De lo contrario, todas aquellas personas que ya tuvieran dada de alta su prestación antes del 9 de marzo no está sujetos a ningún riesgo de retraso.
Así mismo, el SEPE ya se ocupó de anunciar la semana pasada que los plazos de tiempo marcados para la solicitar las prestaciones correspondientes se ampliarían el equivalente al tiempo que el servicio estuviera de baja para evitar causar de esta manera problemas a los ciudadanos en sus gestiones.
Hasta el momento, tal y como ha informado Manuel Galdeano, delegado de CSIF en el organismo, la restauración del sistema informático permanece incompleta y en función de territorios, puesto que a causa de este ciberataque y la posterior encriptación de las bases de datos del SEPE y se ha restaurado la actividad de los terminales uno a uno.
De la misma manera, Gerardo Gutiérrez, en una entrevista para ‘Cadena Ser’, aseguró que el ataque se había contenido, se estaba trabajando para solucionarlo cuanto antes y que, lo positivo era que los datos confidenciales de las personas inscritas en las oficinas SEPE no se han visto comprometidos. Igualmente pidió públicamente que estos usuarios comprobasen con cuidado el remite de los correos electrónicos presuntamente remitido por el SEPE y asegurándose de esta forma su autenticidad.
Gutiérrez aseguró que cuando se retome la normalidad y estén operativas todas las aplicaciones, el SEPE elaborará un plan de choque con el fin de actualizar y poner al día durante el mes de marzo las demoras producidas por este 'ciberataque'. «Estamos en disposición de afirmar que durante el mes de marzo podremos responder con normalidad al reconocimiento de prestaciones por desempleo», explica el directivo.