A principios de octubre, la noticia de la muerte de Augusto Claisse de 23 años supuso un verdadero cisma mediático.
Su fallecimiento en el hospital donde permanecía ingresado por sus problemas psiquiátricos estuvo rodeado de extrañas circunstancias y sirvió para reabrir el debate de la salud mental en nuestro país.
Augusto padecía bipolaridad y esquizofrenia, pero ya llevaba varios meses ingresado tras vivir una complicada etapa de su vida con las drogas y la calle como protagonistas.
"Augusto era un chico estupendo y deportista, monitor de pádel, pero necesitaba estar centrado. Se iba mucho de casa por peleas. Una circunstancia que le llevó a caer en las drogas y le alejó del mundo del deporte", relata la tía del joven fallecido, Susana, en declaraciones a El Cierre Digital.
El objetivo era que Augusto recibiera el tratamiento adecuado para controlar su patología y retomara su vida de antaño, cuando era un gran aficionado al deporte.
Sin embargo, su deseo y el de su familia se vio truncado por una extraña muerte rodeada de incógnitas.
Los resultados de la autopsia de Augusto Claisse, el joven de 23 años fallecido
Según la versión que apuntaban desde el hospital Durán y Reynals de Hospitalet de Llobregat, el joven habría fallecido tras precipitarse contra un cristal ubicado en los pasillos del centro. Una teoría que nunca sostuvieron los testigos presentes en el hospital ni creyeron los familiares de Augusto.
La tía del joven ha emprendido acciones legales contra el centro para intentar esclarecer los hechos. Algo que está más cerca de producirse tras los resultados de la autopsia que le practicaron al paciente tras su fallecimiento.
Tal y como ha revelado Susana en una entrevista concedida a El Cierre Digital, los resultados preliminares de la autopsia de su sobrino resultan tremendamente perturbadores.
Según señala, el joven habría muerto por un edema pulmonar causado por la contención que ejercieron los trabajadores del hospital ante un brote que estaba sufriendo.
"Se le abalanzaron y no le dejaban respirar. Todo fue un despropósito", asegura Susana antes de añadir que se trata de una teoría avalada por el relato de los testigos presentes.
A falta de obtener los resultados definitivos de la autopsia, que podrían llegar en dos meses, la familia de Augusto insiste en señalar hacia la actuación del personal sanitario.
Considera que no se siguieron los protocolos adecuados y no piensa descansar hasta que los responsables respondan por lo sucedido.
"Con base en los testimonios, creemos que tuvieron lugar muchas negligencias. Señalan una serie de errores cuando el niño se quedó sin pulso. El Servicio de Emergencias Médicas tardó media hora en atenderlo", asegura la tía del joven, que ya ha puesto el caso en manos de la Justicia.
La familia de Augusto, decidida a llegar hasta el final para esclarecer los hechos
En el acta de levantamiento del cadáver consta que la situación se descontroló y el personal médico decidió actuar ante el riesgo de que el joven se autolesionase.
"Le ponen esposas y una venda en los tobillos, trasladándole a un box para contención de cinco puntos. Muñecas, tobillos y cintura", señala El Cierre Digital según el informe.
A continuación, el joven "está con pulso débil, cianótico y arreactivo" y se inician las maniobras de reanimación cardiopulmonar sin respuesta positiva. Una situación que, según la tía de Augusto, se produjo como consecuencia de la sobremedicación a la que sometían al joven.
"Le administraron Haloperidol y el niño era alérgico", asegura Susana.
En cualquier caso, habrá que esperar los resultados de los análisis toxicológicos postmortem para arrojar luz sobre lo sucedido. Además, en los próximos días serán citados los testigos y pacientes psiquiátricos que presenciaron los hechos, así como el personal del hospital.