La suspensión de la búsqueda de Anna y Tomás Gimeno les deja en un limbo legal. Para la justicia, tras dos años desaparecidos pasarán a ser considerados como muertos. Pero la organización SOS Desaparecidos los mantendrá en su lista hasta que aparezcan.
Tomás Gimeno y sus dos hijas, Anna y Olivia, desaparecieron el 27 de abril en Tenerife. El cadáver de Olivia apareció el 10 de mayo, pero Tomás y Anna siguen en paradero desconocido. Con sus nombres, los desaparecidos en Canarias ascienden ya a 2.706.
La lista de desaparecidos en Canarias es la mayor de toda España. Mientras que en el resto del país el número de casos se ha reducido durante la pandemia, en las islas ha aumentado hasta los más de 2.700. Se trata de una tendencia preocupante por el agravo comparativo.
El año pasado se contaron 16.529 denuncias en total en toda España, de las cuales 1.349 siguen activas. Es decir, que más del 90% de las desapariciones se resolvieron poco después. El resto, un millar, siguen siendo objeto de investigación.
En Canarias, la gran mayoría de las desapariciones se han registrado en Las Palmas, 2.060 en total. En Tenerife, estas ascendieron a 646. Desde la desaparición de Tomás y sus dos hijas, en las islas se ha perdido el rastro de siete personas más.
El principal puntal de la red de apoyo a la investigación y a las familias es la organización SOS Desaparecidos. Como en el caso de Anna y Tomás, su filosofía consiste en no dar a nadie por fallecido hasta que no aparezca. Incluso cuando todos los indicions apuntan a un fatal desenlace.
La organización que dirige Joaquín Amills recuerda que no es necesario esperar 24 ni 48 horas para denunciar la desaparición. Según la normativa, la policía tiene la obligación de registrar la denuncia de inmediato. De hecho, las primeras 72 horas son cruciales.
Siete desaparecidos más
Desde la desaparición de Tomás Gimeno y sus hijas Anna y Olivia ha habido siete casos más. El primero fue Juan José Ferraces, un hombre de 38 años desaparecido en Agüimes (Gran Canaria). Apareció poco después en buen estado de salud.
El 14 de mayo se perdió el rastro de Akram Kamal, un niño de 16 años, en Santa Cruz de Tenerife. Al día siguiente se denunció la desaparición de Yanira Borges, una chica de 15 años, en Tenerife. Los dos casos siguen abiertos, ya que no han aparecido.
La policía busca también en Tenerife a Paula Pérez, una adolescente de 16 años de la que no se sabe nada desde el 12 de junio. Francisco Jesús García se esfumó en Granadilla el 20 de junio, y su caso sigue abierto. Como el de Mariana Carrero, de 16 años y de Tenerife.
El último desaparecido en Canarias es Jaime Ramón Castellano, de 54 años. Se esfumó sin dejar rastro el 3 de julio, y se teme lo peor ya que necesita medicación. Sus nombres, junto con los de Anna y Tomás, engrosan la mayor lista de desaparecidos de España.
Yeremi y Sara, dos viejos casos sin resolver
En esa lista están también los nombres de Yeremi Vargas y Sara Morales. A Yeremi se le perdió el rastro el 10 de marzo del 2007, cuando tenía 7 años. A Sara la vieron por última vez el 30 de julio de 2006, cuando tenía 14 años.
En el caso de Yeremi hay una persona inculpada por su desaparición. Se trata de Antonio Ojeda, apodado El Rubio. El cuerpo del pequeño nunca apareció, pero estando ya en la cárcel confesó que lo habían quemado junto a un colchón.
El día que desapareció, Yeremi había salido a jugar a una zona cercana a su vivienda en Vecindario (Gran Canaria). Nunca regresó a casa, y su familia emprendió una búsqueda que aún no ha terminado. Su caso sigue lleno de incógnitas a día de hoy.
En Las Palmas tampoco se olvidan de Sara Morales, la chica de 14 años que salió para ir a un centro comercial y nunca más volvió a casa. Entre los dos puntos apenas había un kilómetro de distancia, pero nunca llegó a su destino. Su móvil dejó de funcionar al instante.
El caso causó una gran perplejidad en los investigadores, que no encontraron ninguna pista fiable para descubrir la verdad. Mientras, su familia sigue luchando para que no quede en el olvido. Hubo dos personas bajo la lupa, pero el cuerpo de la menor nunca fue encontrado.
Aunque se tiene la seguridad de que Yeremi Vargas y Sara Morales fueron raptados y asesinados, hasta que no aparezcan sus cuerpos se consideran desaparecidos. Por eso sus nombres siguen en la lista de SOS Desaparecidos en Canarias. La más larga de España.