Escritorio con un ordenador portátil y un ratón

Los alumnos que no podrán pasar de curso pese al aprobado general

Es una información de interés tanto para los propios estudiantes como para sus padres

Isabel Celaá, ministra de Educación, ha hecho público el acuerdo al que se ha llegado con las autonomías respecto al actual curso escolar. Así, no solo ha dado a conocer que acabaría en junio, como es lo habitual, sino que también ha hablado de que se iba a facilitar la promoción de los estudiantes, una cuestión de la que ha comenzado a hablarse de forma popular como 'aprobado general'.

Sin embargo, la ministra ha querido dejar patente que en absoluto es un aprobado general, porque «si así fuera, daría igual lo que el alumno hiciese y sería injusto con aquellos que buscan superarse». De ahí que no haya dudado en especificar que «ningún alumno va a perder el curso por el coronavirus y todos serán evaluados con justicia».

Asimismo, Celaá ha afirmado en una entrevista al diario 'El País' que «lo que pretendemos es que la promoción del curso (pasar al siguiente) sea más elevada que en circunstancias de normalidad. Igualmente, la repetición debe ser inferior porque los alumnos están viviendo situaciones complicadas y muy dolorosas».

Es más, respecto a qué estudiantes van a ser los que puedan repetir curso ha añadido que «la decisión sobre esos tendrá que ser argumentada, deberá ser para su beneficio y tendrá que estar convenientemente acreditada».

Críticas a las medidas

Distintos profesionales de la educación han criticado los acuerdos adoptados, como sería el caso de Fernando Trujillo (profesor de la Universidad de Granada). Este ha concedido una entrevista al programa radiofónico 'Herrera en COPE' y ha manifestado que el 10 % de los estudiantes no han tenido educación online por carecer de conexión a Internet.

Es más, sobre esos ha expuesto que «el derecho a la educación de este alumnado queda en suspenso y no se le va a poder evaluar. La ministra Celaá no ofrece una solución a esta situación». No obstante, ella ha tenido en cuenta a esos estudiantes y precisamente por su circunstancia ha señalado que «es necesaria una evaluación excepcional porque muchos de aquellos están desconectados».

Por eso, no ha dudado la citada autoridad del gobierno en recalcar que la evaluación será como viene siendo, global y continua, que  los profesores tomarán como base los dos primeros trimestres que han sido presenciales y un tercer trimestre que tendrá su correspondiente evaluación, pero que no debe servir «para perjudicar». Es decir, que se tendrán en cuenta fundamentalmente las dos primeras evaluaciones, impartidas en las aulas, y únicamente de forma positiva la tercera.

Asimismo, ha dejado patente su confianza en los docentes exponiendo que «son ellos quienes tienen las competencias para evaluar y quienes mejor saben cómo han de calificar a sus alumnos».