Jordi Cruz, Pepe Rodríguez y Samantha Vallejo-Nágera son los rostros principales de 'MasterChef', pero su labor profesional no solo se concentra en los fogones del concurso de Televisión Española. Todos ellos han seguido con sus negocios fuera de la televisión: ella con su catering y ellos con sus respectos restaurantes.
Sin embargo, la pandemia ha supuesto que el mundo de la hostelería no esté atravesando su mejor momento y pese a ser cocineros de renombre, ellos no han quedado exentos de verse afectados por la crisis sanitaria.
Pepe Rodríguez regenta el restaurante El Bohío situado en Illescas, Toledo, y siempre le había ido bien con él. Hasta ahora. El chef ha aprovechado una entrevista con la revista 'Lecturas' por el estreno de la novena edición anónima de 'MasterChef' para contar cómo está viviendo la situación en este momento tan difícil por culpa de la pandemia.
«Estamos en el límite»
El cocinero ha explicado que su establecimiento está atravesando un momento muy complicado por culpa de la crisis sanitaria.
«Hay un momento en que cada uno tiene un límite», ha señalado Pepe Rodríguez en la entrevista. «No las tengo todas conmigo. Estamos en el límite», ha lamentado.
El chef ha asegurado que no desea cerrar las puertas de El Bohío, pero que todavía no ha descartado ninguna posibilidad y que, aunque seguirá luchando para que siga abierto, la decisión que tome al respecto dependerá de cómo evolucione la situación sanitaria.
«Yo voy a dar todo lo que pueda para mantenerlo hasta que un día diga: 'Señores, hasta aquí hemos llegado'», ha garantizado Pepe Rodríguez.
A pesar de que seguirá luchando para que El Bohío se mantenga en pie, el chef ha explicado que está viviendo un momento muy complicado.
Las restricciones por la pandemia han hecho que haya tenido que cerrar el restaurante en más de una ocasión y esto ha provocado que sus trabajadores hayan estado viajando entre el ERTE y el despido. «El trabajo ha descendido un 40 o 50%. No puedes tener la misma plantilla», ha lamentado el chef.
El Bohío solo es uno más de los establecimientos que se han visto afectados por la epidemia. Se ha calculado que unos 85.000 locales han tenido que cerrar de forma definitiva y 35.000 trabajadores de la hostelería han estado en un ERTE.
Por este motivo, Pepe Rodríguez se manifestó el pasado mes de mayo frente al Congreso de los Diputados junto a un centenar de compañeros de profesión para reclamar que se tuviera en cuenta a este sector antes de implementar las medidas para tratar de combatir el virus.
No es la primera vez que el restaurante del chef pasa por un mal momento económico. El propio cocinero confesó hace un tiempo que aceptó ser jurado de 'Mastechef' en gran parte porque El Bohío estaba atravesando una crisis económica y el dinero que le ofrecían por ser jurado del concurso le venía muy bien.
85 años de historia
El Bohío lo crearon su abuela Valentina y su tía Romana como una pequeña tasca familiar en el año 1934 y se convirtió en el único lugar para parar a comer entre Madrid y Toledo.
Sin embargo, cuando llegó a sus manos él lo convirtió en un sitio de peregrinaje y ahora es un establecimiento que mezcla la gastronomía popular manchega con la alta cocina en un edifico que ya casi no tiene nada que ver con el de hace 85 años.
Pepe Rodríguez ha llegado a lo más alto con El Bohío y gracias a su trayectoria con él pudo alzarse con el Premio Nacional de Gastronomía en el año 2010 y ha conseguido una estrella Michelín.