Nira Ashraf y Mohamed Adel se conocieron en la Facultad de Arte de Mansoura (Egipto) e iniciaron una relación. Ella, una estudiante con gran proyección social, había iniciado una carrera como modelo. Cuando decidió dejar a su novio y bloquearlo en las redes sociales, él se vengó de forma cruel.
Mohamed Adel ha sido detenido por haber apuñalado hasta la muerte a su compañera de facultad, Nira Ashraf. La fiscalía ha abierto una investigación, y la principal hipótesis es que se trata de un crimen pasional. El propio asesino confesó haberlo hecho porque ella le bloqueó en Facebook.
Después de cometer el crimen intentó autolesionarse con el ánimo de suicidarse, pero no lo consiguió. Ya delante del fiscal, el agresor explicó que ella se había alejado después de un año y medio, y que no tenía sentido seguir viviendo. Ahora se enfrenta a graves cargos por asesinato.
Decidió matarla por querer ser libre
Según declaró el propio Adel, conocía a la estudiante desde hacía un tiempo y habían mantenido una relación sentimental. Luego ella empezó a trabajar como modelo, se hizo famosa y tenía una gran cantidad de seguidores. Las ansias de libertad de Nira no encajaban en el mundo de Adel.
Fue entonces cuando decidió dejarlo y, ante la insistencia del joven por retomar el contacto, cortó por lo sano y lo bloqueó en Facebook. El joven, obcecado, decidió matarla y quitarse después la vida. Decidido a ello cogió un cuchillo de su casa y se dirigió a la universidad a esperar a que llegara.
Cuando la vio bajarse del autobús fue a por ella y la atacó a traición, propinándole varias puñaladas en el cuello y el pecho. Un vigilante de seguridad separó al agresor de la víctima, pero ya era demasiado tarde. La estudiante recibió cuchilladas mortales de necesidad, que acabaron con su vida.
La había amenazado varias veces
El ministerio público ha escuchado a unos 40 testigos incluido este vigilante de seguridad de la universidad. Él fue quien redujo al acusado y lo entregó a la policía junto al arma utilizada en el asesinato. Según ha declarado, no se lo pensó dos veces y corrió hacia él para salvar a la muchacha.
También ha declarado el padre de la víctima, según el cual el agresor había amenazado a su hija en más de una ocasión. La familia había denunciado las amenazas ante las autoridades, pero no se hizo nada para protegerla. El caso ha reavivado la polémica por la seguridad de las mujeres en Egipto.
El gobierno ha sido fuertemente criticado por no proteger a las mujeres víctimas de la violencia de género. En su último informe, Amnistía Internacional ha señalado a las autoridades egipcias por no prevenir ni investigar la violencia contra las mujeres y las niñas. Nira ha sido una víctima de ese sistema.
Podría haberse evitado
La justicia tendrá que decidir ahora qué hacer con el asesino, que intenta defenderse con la excusa de que estaba deprimido. Asegura que la ruptura sentimental lo dejó hundido, y que actuó cegado por la desesperación. La muestra de ello, afirma, es que luego intentó quitarse la vida porque no quería vivir.
Nira Ashraf fue enterrada ayer por la tarde, y una gran multitud de vecinos acompañaron el féretro de la joven. La familia obtuvo el permiso para enterrarla después de que los forenses finalizaran la autopsia. Durante el funeral era palpable el dolor, pero también la indignación por una muerte que podría haberse evitado.
Nira Ashraf era una joven inteligente y estudiosa a la que sus amigos recuerdan entre lágrimas como una persona de buen corazón. Era una apasionada del arte, y en sus redes sociales colgaba fotos de sus visitas a los museos. Todos sus sueños acabaron de repente, de manera trágica.