Una enfermera con una vía intravenosa

Agresión a una enfermera en España: 'Sois cómplices de una mentira'

El agresor insultó a la enfermera, la empujo y consiguió quitarle la mascarilla

Una enfermera con una vía intravenosa
Agresión a una enfermera en España: 'Sois cómplices de una mentira' | iStockPhoto (Ivan-balvan)

Una enfermera que trabaja en un centro sanitario de España fue víctima de una agresión por parte de un negacionista del coronavirus. Los hechos se produjeron en el centro de salud Parque-Somió del barrio de La Arena, en Gijón, cuando la enfermera volvía por la avenida de Torcuato Fernández Miranda después de haber hecho varias visitas domiciliarias a otros pacientes.

Según ha denunciado la víctima, un hombre que circulaba en bicicleta por la zona comenzó a referirse a ella mediante insultos en medio de la calle, pasando también al contacto físico y empujándola al grito de «sois cómplices de una mentira que nos está arruinando». Además, durante todo el ataque, el agresor intentó quitarle la mascarilla a la enfermera hasta que finalmente lo consiguió, una acción que comporta un riesgo añadido debido a la profesión de la víctima. 

Al parecer, el agresor, de unos 40 años, iba acompañado de otros dos hombres en el momento en que sucedieron los hechos, que no participaron en la agresión pero tampoco hicieron nada por evitarla. La enfermera presentó una denuncia ante la Policía y explicó a los agentes que el hombre estaba «visiblemente alterado». Por ahora, los investigadores están intentando identificar y localizar al agresor.

La víctima de la agresión ha denunciado estos hechos que suceden cuando ella lleva años dedicándose a su profesión en el Servicio de Salud del Principado de Asturias, y ha criticado la actitud de los negacionistas del Covid-19 y el hecho de que existan «estos discursos exacerbados» y que tengan «seguidores en la sociedad».

Además, sobre la sobrecarga de trabajo de los profesionales sanitarios durante la pandemia ha añadido que «no llegamos a todos los casos, pero no es por nuestra falta de trabajo sino por la falta de personal», tal como recoge 'El Comercio'. «Sabemios mejor que nadie de la crítica de la situación que estamos atravesando», matiza, pero pide «civismo a los pacientes» precisamente por la misma razón.

Aumentan los episodios de tensión de los 'negacionistas' del Covid-19

Por desgracia, no es la primera vez que ocurre una situación así y que tiene a los denominados 'negacionistas' como principales protagonistas. Los negacionistas son personas que rechazan la existencia del Covid-19 o que aceptan que existe pero niegan que revista la gravedad que provoca. Además, suelen acusar a los médicos, políticos y medios comunicación de difundir el miedo o de querer hundir la economía. 

Algunos de ellos incluso creen que el coronavirus fue creado en un laboratorio chino de Wuhan, donde comenzó el brote, aunque las creencias sobre quién lo liberó o si fue intencionadamente se diseminan en varios frentes. Algunos incluso creen que es una estrategia de dominación mundial de Bill Gates, quien pretendería inyectar chips electrónicos dentro de las personas a través de la vacuna.

En los últimos meses, cada vez más personas se han mostrado partidarias de estas tesis, y lo que al principio eran grupos pequeños cada vez están teniendo más voz y seguidores, provocando también algunos altercados violentos.

Hace solo unos días, unos 'negacionistas' que se estaban reuniendo sin mascarillas ni distancia de seguridad atacaron a unos reporteros de La Sexta que fueron testigos de esa reunión. «Había niños y personas de unos 50 años sin mascarilla y saltándose las normas», aseguraron los reporteros. 

Los agresores atacaron a los reporteros asegurando que estaban «fastidiando un actor súper bonito» y les acusaron de «dejarse manipular». Finalmente, varios de los asistentes empezaron a empujar a los reporteros, que les pedían que no les tocaran por no estar respetando las normas de seguridad frente al Covid-19. 

Entonces los ataques se recrudecieron y se acabaron convirtiendo en insultos homófobos contra uno de ellos, pero finalmente los agresores se acabaron dispersando antes de que la Policía llegase al lugar de los hechos.