Leticia Sabater ha vuelto a pasar por quirófano, y es que la artista ha dejado muy claro que no piensa parar hasta transformar su imagen por completo.
Y es que sus últimas intervenciones estéticas no dejan a nadie indiferente. De hecho, la propia Leticia confirmaba que habían sido "ocho horas de operación, la más larga de mi vida".
Eso, sin contar con el dineral que se ha dejado en las operaciones: "En esta me he gastado 15.000 euros porque eran muchas cosas", reconocía.
Hace apenas un año, en 2021, Sabater ya entraba al quirófano para hacerse retoques por valor de 40.000 euros, aunque a ella le hicieron precio y se lo dejaron en 25.000.
En aquella ocasión le hicieron un lifting de cuello y barbilla, y se retocó los pómulos y el pecho. Y en esta ocasión volvía a retocarse los pómulos, los ojos, los pechos, los glúteos y la nariz.
Aunque ella aseguraba no tener ninguna adicción a las operaciones. "La única que me he hecho por capricho son los abdominales, el resto las necesitaba".
"Me he operado hace tres semanas y es una recuperación de tres meses", aunque ella asegura sentirse mejor que nunca.
"Nunca en tu vida me has visto los ojos tan rectos", explicaba Leticia, que se operaba por primera vez de estrabismo en 2017, pero no obtuvo los resultados deseados.
Y respecto a sus pechos, tampoco quedaba satisfecha a pesar de haber aumentado una talla: "Yo quería canalillo", dejaba caer.
Leticia Sabater impacta con sus últimos retoques estéticos
Así, Sabater presume de la mejor versión de si misma, algo en lo que lleva enfocada mucho tiempo.
Sin embargo, eso no ha evitado que reciba muchas críticas. "Parece un travesti", llegaba a decirle Víctor Sandoval.
"Eso es un poquito de transfobia, es muy feo lo que has dicho", saltaban en su contra el resto de compañeros del Deluxe.
"Quería decir que se parece a 'La Veneno'", rectificaba Sandoval. Mientras que Kiko Matamoros no se cortaba ni un pelo y dejaba caer: "Es de lo más homofóbico que he escuchado en este plató".
Pero Víctor todavía no había terminado de cebarse con la interprete de 'La Salchipapa'. "No me gusta nada, tiene unas tetas horrorosas", seguía atacándola.
"Está muy operada pero la veo igual que siempre. Quizá debería operarse un poco más, ponerse una teta en la barriga", bromeaba.
Mientras que otros colaboradores como Belén Rodríguez seguían sacándole defectos: "La boca la tiene un poco torcida", opinaba.
Aunque ella misma aseguraba que era la impresión que daba al seguir "hinchada por el nivel tan extremo de las operaciones".
Todo comenzaba en 1999, cuando la artista hablaba por primera vez de 'sus arreglitos'. "Te hiciste una intervención del pecho, luego te arrepentiste y quisiste volver a arreglarlo", le decía Javier Sardá en Crónicas Marcianas.
"¿Cómo fue aquello? ¿Duele mucho? Qué duele más… ¿La primera operación o la segunda?", le preguntaban. "No duele nada, porque te duermen y ni te enteras", explicaba ella.
Y a pesar de haber tenido una mala experiencia, no dudaba en volver a recurrir a la cirugía para conseguir el resultado deseado.
"Soy partidaria de mejorar en esta vida, ¿por qué te vas a quedar anclado?", apuntaba.
"Si tienes la nariz como Pinocho... ¿Por qué vas a tener que ser Pinocho toda la vida, si te puedes operar perfectamente?", insinuaba.
"Yo sé que cuesta caro y que mucha gente no se lo puede permitir", añadía. "Soy partidaria de las técnicas modernas y que, igual que avanzamos en todo, pues lo mismo. Las modelos, ahí donde las veis, son tías que están operadas de la cabeza a los pies".