Tamara Gorro y Ezequiel Garay recuperan poco a poco la felicidad que habían perdido. Era a principios de año cuando la influencer anunciaba la triste noticia de que ella y su marido habían decidido separarse.
Sin embargo, parece que finalmente han conseguido arreglar sus diferencias, y es que necesitaban ese distanciamiento para reencontrarse como pareja.
Así, Tamara anunciaba por todo lo alto que habían retomado su relación. "Mejor juntos", escribía junto a una imagen que parecía hablar por si sola.
"Porque las sonrisas sean eternas y juntos", proseguían las muestras de afecto entre ambos. "Toda la vida, mi vida. Te amo mucho, hermosa mía", son las preciosas palabras que le dedicaba Ezequiel a su mujer.
Dejando de lado los problemas que han afrontado estos últimos meses, la pareja se muestra más fuerte que nunca.
Aunque parece que no todos se alegran y hay quien incluso duda de sus intenciones, asegurando que todo se trata de una estrategia en redes sociales para llamar la atención.
Molesto con los comentarios, Garay saltaba en defensa de su mujer. "Nunca he hecho ninguna declaración sobre lo que lleva sucediendo estos meses. Pero es el momento de hacerlo, porque creo que todo tiene un límite y se está sobrepasando", apuntaba.
"Cuando mi mujer y yo nos separamos, recibía miles y miles de mensajes de pena, tristeza y apoyo, mucho apoyo… incluidos los medios de comunicación".
Justo por eso, el futbolista lamenta que ahora que están juntos de nuevo "se esté diciendo que todo era una mentira y nadie se alegra".
"Estamos viviendo en un mundo al revés, en el que prevalece lo malo, sobre lo bueno. Nos alegramos cuando a las personas les va mal y criticamos cuando les va bien", proseguía Ezequiel en su publicación.
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Ezequiel Garay da la cara por Tamara Gorro
"Pongámonos de acuerdo, por favor, y demos ejemplo a esta sociedad y a las nuevas generaciones", pedía.
"Tuve que aguantar cómo se especulaba sobre mí y mi separación con mentiras. Dando voz a personas que inventan todo para hacer daño, qué triste", sentenciaba el marido de Tamara.
Aunque, sin duda, lo que más le ha dolido al argentino es que se ponga en duda la enfermedad de su mujer. "También quiero decir que estoy cansado de que se insinúe que la enfermedad de mi mujer es una farsa".
"¿Tiene que suicidarse como por desgracia en otros casos, para que se sepa que es verdad?", se preguntaba. "¿Qué narices está pasando en este mundo?"
"Ojalá fuese una mentira, porque no le deseo a nadie lo que ella está viviendo desde hace años, y por supuesto yo también como compañero de vida", dejaba claro Garay.
"Pero como ahora empieza a sonreír, ya no vale, ya es mentira… Todo esto es lo que provoca que no se avance en las enfermedades mentales, la duda".
Después de haberlo pasado bastante mal, parece que Tamara poco a poco está viendo la luz al final del túnel.
La influencer se ha refugiado en su trabajo y en sus hijos, que también la ayudaron a replantearse la durísima decisión de quitarse la vida.
Y a pesar de que sigue luchando contra las secuelas que le ha dejado la depresión, no cabe duda de que cada día está mejor.
"Dejemos que la gente sea feliz, que enfermen y tengan la oportunidad de sonreír para siempre o al menos cinco benditos minutos", sentenciaba.
"Dejemos que la gente se pelee, se arreglen o se separen de por vida, dejemos a la gente vivir su vida", aseguraba. "Estoy convencido de que viviremos en un mundo mucho mejor".