Quedan pocas horas para que el séptimo episodio de 'Rocío: Contar la verdad para seguir viva' sea emitido. Un episodio que promete ser de lo más polémico pues, la hija de 'la más grande', relatará el día en que recibió una paliza de manos de su propia hija. Rocío Carrasco ya adelantó en la entrevista que concedió en directo hace una semana, ciertos aspectos de lo que ocurrió aquella mañana y salió en defensa de su hija no culpándola por los golpes que recibió: «La paliza me la estaba dando otra persona» dijo señalando a Antonio David Flores.
Anticipándose al revuelo que su testimonio puede causar, se rumorea que Rocío Carrasco ha pedido que sean eliminados 11 minutos del episodio que verá la luz esta noche en un intento de seguir protegiendo a su hija. Pero Rocío Flores ha opinado sobre la decisión que ha tomado su madre con un mensaje contundente.
Rocío Flores pide que se emita todo el episodio al completo
Madre e hija han hallado en los platós de televisión la mejor manera de mandarse mensajes. Después de que Rocío Flores le pidiera en 'El programa de Ana Rosa' que le cogiera el teléfono, su madre le contestó confesando que no estaba preparada. Los profesionales que la tratan no consideran que esté lista para mantener una conversación con su hija, y lo mejor es esperar.
Ahora ha sido Rocío Flores la que quiere desentenderse de esa protección que le brinda su madre en el documental y ha hecho una petición en el programa donde colabora: «Estoy viendo la docuserie de mi madre y el capítulo de hoy también lo veré. Me gustaría decir una cosa. Se ha dicho que se eliminan 11 minutos del documental de mi madre porque me quiere proteger» comienza diciendo la joven que, segundos después cuestionaba las intenciones de su madre.
«Primero, cuando quieres proteger a tu hija, no haces un capítulo hablando de tu hija, por lo tanto lo de la protección lo pongo en duda. Pido a los responsables del documental y de la cadena, que quiero escuchar el testimonio de mi madre entero, quiero escucharlo, tengo todo el derecho del mundo» reclamaba.
A Rocío Flores hay cosas a las que no logra encontrar explicación y así lo exponía: «Me parece irónico, porque se dice que ha levantado teléfonos para que no se emita, pero se sienta con sentencia en mano. Al equipo médico que tiene, que le recomienda no hablar conmigo, pero sí contar la historia en televisión con cuatro millones de espectadores».
«No tengo miedo a nada. Sé lo que he vivido en esa casa»
Si hay algo que le chirría todavía más a Rocío Flores, es el hecho de que su madre no llame a su hermano. Puede llegar a entender que no le coja el teléfono a ella, pero ¿qué hay de David?: «Lo único que me pregunto es… ¿Mi hermano está metido en mi pack? ¿No habla con él? No se interesa por su salud, por cómo está…» se preguntaba.
Con una actitud desafiante que dejaba claro de qué lado sigue estando a pesar del testimonio de Rocío Carrasco, la joven sigue manteniendo su versión y se aleja de la historia relatada por su progenitora: «Me parece cuestionable que ahora se oculte un testimonio que está grabado desde hace un año. No tengo miedo a nada. Yo sé muy bien lo que he vivido en esa casa y con eso me quedo» sentencia.
«Ha sido ella la que ha dado el paso de sentarse con sentencia en mano, quiero que se emita todo. No tengo miedo. Estoy destrozada, para mí no es agradable, lo paso mal, pero no creo que tenga que estar llorando por las esquinas. En el mundo de la televisión somos muñecos, pero yo antes de ser un muñeco, soy persona» decía para terminar con un mensaje contundente a su madre: «Ya no me llames a mí, pero llama a tu hijo» zanjaba.