Rocío Flores y José Antonio Avilés coincidieron concursando en la edición de 2020 de Supervivientes. Allí forjaron una amistad llena de altibajos. Amistad que mantuvieron hasta hace unos meses en los que, tras unos instantes iniciales de apoyo, el colaborador se puso en su contra.
En concreto, el cordobés arremetió contra la joven por no ver y entender el documental de su madre, Rocío Carrasco. Unas palabras que no gustaron nada a ella y que les llevó a romper toda la relación. Pero ahora han vuelto a verse las caras.
Aquel ha ejercido como reportero y ha acudido a Málaga para seguir los pasos de la hija de Antonio David. De esta manera, se han encontrado y lo cierto es que el instante ha sido tenso.
El reencuentro de la hija de Antonio David y el colaborador
El programa Viva la vida, donde colabora, ha enviado a José Antonio Avilés hasta tierras malagueñas. Lo ha hecho para, entre otras cosas, descubrir cómo se encuentra Rocío Flores en estos momentos. Sí, después de la polémica surgida por su nefasto comportamiento en el plató de Supervivientes.
Aquel se ha metido en la piel de reportero y ha seguido los pasos de la joven hasta que ha dado con ella. Ha hecho guardia en la puerta de su casa con un objetivo personal: “Después de dos meses sin hablarnos, voy a intentar hacer las paces”.
La hija de Rocío Carrasco ha salido de su vivienda y el colaborador rápidamente ha corrido detrás de ella. Lo primero que le ha dicho es: “Tenemos una conversación pendiente”. Y la respuesta que ha obtenido no ha podido ser más clara: “Yo no tengo nada que hablar contigo”.
El cordobés ha continuado de esta manera: “Tendrás algo que decirme después de lo que has dicho de mí en los platós”. Unas palabras estas que lo que han hecho es provocar una carcajada de la joven. Carcajada tras la que ha pronunciado: “¡Ay, Dios! Me descojono”.
Tan metido ha estado en su papel de reportero que le ha preguntado a ella si quería mandarle un mensaje a su madre. Pero la respuesta que ha obtenido ha sido: “Es que es lo más gracioso que he escuchado en mucho tiempo”.
El colaborador 'persigue' a su examiga durante 24 horas
Rocío Flores no se lo ha puesto nada fácil a José Antonio Avilés. Sin embargo, este no ha cejado en su empeño de conseguir unas palabras de la joven. De ahí que no ha dudado en seguirla durante todo el día.
Ha sido testigo del reencuentro de la hija de Antonio David con unas amigas o de que ha parado a tomar algo en una terraza. Pero, en ningún momento, ella ha contestado a sus preguntas.
Ante el hermetismo de su examiga, el cordobés le ha dejado claro que estaba haciendo su trabajo. Y esta le ha espetado: “Lo respeto ¿Me ves que te haya dicho algo? Respeto que estés aquí y tengas tu trabajo. A mí no me molestas”.
En ese momento, en el que estaban hablando en plena calle, ha pasado un coche. La joven ha expresado: “Cuidado que te van a atropellar” y él ha respondido: “No te preocupes, que no me atropellan”. Instante en el que esta le ha dado un 'zasca': “No, a ti no, era a él (el cámara)”.
Avilés también le ha preguntado sobre los vetos que ha realizado en Telecinco o sobre su relación con Ana María Aldón. No obstante, no ha respondido a nada.
Tras emitirse esas imágenes, ya en Viva la vida él ha confesado: “Yo la piqué muchísimo. A mí y al cámara nos llamó mucho la atención la templanza con la que iba. Os puedo asegurar que no se han visto preguntas duras que le hice y no se ponía nada nerviosa”.
“Sí que es cierto que cuando me ve se pone muy nerviosa y no sabía dónde meterse. Yo lo pasé muy mal. Hubo un momento que hubo sinergia entre nosotros y tuve la percepción de que si la llamo para tomar un café fuera, creo que aceptaría”.