El último capítulo de 'Rocío, contar la verdad para seguir viva' fue realmente desgarrador, ya que Rocío Carrasco relató uno de los episodios más duros y tristes de su vda. El momento en el que se dio cuenta de que su ex, Antonio David, había convertido a su hija en un monstruo. Un monstruo capaz de pegarle una paliza hasta dejarla incosciente.
Un conflicto que sigue en boca de todo el mundo, sobre todo porque Rocío Flores parece haber cambiado drásticamente de idea y ya no quiere saber nada de su madre. Al parecer, lo único que le importa ahora es salvar la relación con su hermano David, quien también ha quedado muy tocado con el relato de su madre.
Y es que los detalles acerca de ese fatídico día en el que los caminos de madre e hija se separaban para siempre, no dejan de sucederse. Aunque, lamentablemente, la que sale peor parada es Rocío.
Según el avance del próximo capítulo del documental, parece que el infierno de Carrasco no había hecho más que empezar tras la paliza de su hija, ya que después tuvo que enfrentarse a la denuncia por maltrato continuado que esta interpuso en su contra.
Además, según narra Rociíto, su hija incluso fue capaz de grabarla con un móvil mientras la golpeaba, aunque no trascienden detalles acerca de quien estaba al otro lado del teléfono. «Ella según me está pegando tiene el móvil abierto, que le ha dado su padre. Lo tenía escondido, y quien estaba al otro lado del teléfono, no lo sé», cuenta en esos minutos inéditos.
«A mi me llaman del cuartel de la guardia civil, y le dicen a Fidel que nos presentemos allí. Eso sustituye a que vaya la Guardia Civil a tu casa y te esposen. Ahí se me informa de que mi hija, en compañía de su padre, me había denunciado por maltrato habitual».
Eso, termina de hundirla. «A mi la paliza no me duele, a mi me duele el saber que una hija mía, que ha estado nueve meses dentro de mí y que la he parido yo, sea capaz de querer ver a su madre en la cárcel por algo que no ha hecho».
La información acerca de que Rocío Flores pudiese haber grabado el terrible incidente, ha generado un auténtico torbellino en el plató de 'Viva la vida'. De hecho, algunos de los colaboradores no han dudado en acusar directamente a Antonio David como principal sospechoso. Sobre todo, porque se ha demostrado la crueldad con la que ha sido capaz de tratar a su ex.
«Existen los datos suficientes para que nadie dude de la existencia del teléfono», ha recalcado Isabel Rábago. «La importancia del teléfono es fundamental. Dice que hay alguien al otro lado de la linea».
«Es terrible que esté grabando», ha indicado Emma García a su vez. Los presentes en plató no han dudado en manifestar que «ya no es solo la agresión, sino que ha sido premeditada». Algo, que le suma todavía más gravedad al asunto, sobre todo a la hora de pensar que Rocío Flores no solo ha sido capaz de darle una paliza a su madre, sino también grabarla.
Carrasco contaba que su ex le había dado un móvil a escondidas a su hija, y que ya en una ocasión la había pillado utilizándolo para hacerle fotos a ciertos documentos de su despacho. La existencia del famoso teléfono se ha demostrado también después del incidente, ya que según ha contado Rociíto, su hija entra al coche y llama a su padre. «Papá, ya está hecho», asegura que fueron las palabras que pronunció en ese momento según lo que le contó el chófer.
Pero, ¿por qué Rocío Flores habría grabado ese momento? Los colaboradores de 'Viva la vida' creen que a lo mejor intentaron usarlo como prueba en contra de Carrasco, ya que en su relato narra claramente como su hija va gritando 'No me pegues, no me pegues, no me pegues', cuando es ella la que le está haciendo daño a su madre.
Sin embargo, parece que finalmente la grabación no habría tenido valor alguno, ya que según el testimonio de Rociíto, ella llega a decir claramente: «No te estoy pegando, eres tú». De esa forma, a los Flores ya no les servía de nada.