Hace un año, los escándalos familiares y la docuserie de su madre convertían a Rocío Flores en la reina absoluta de Telecinco.
A pesar de ser casi una recién llegada en la cadena de Fuencarral, ya que hasta ese momento había preferido mantenerse en un segundo plano, de pronto nadie se atrevía a rechistarle.
La joven hacía y deshacía a su antojo en los platós de televisión. Tanto es así, que incluso se atrevía a vetar a aquellos colaboradores que no le caían bien o se habían posicionado del lado de Carrasco.
Eso generaba un gran revuelo en Telecinco ante el que muchos saltaban indignados, asegurando que "Rocío había conseguido imponer su ley".
Y "sus exigencias tenían como finalidad sentirse cómoda en plató, evitando sentarse con gente que critique a Antonio David Flores o que apoye a su madre".
Belén Ro era una de las principales afectadas, que denunciaba no haber vuelto a trabajar por culpa de la nieta de 'la más grande'.
"Desde que Rocío Flores pidió mi despido, no he vuelto a Supervivientes", se lamentaba la tertuliana. "Lo ha pedido en directo, dos días consecutivos y el día que pidió que me despidieran estabas tú delante y me callaste", le echaba en cara a Marta López, íntima de Olga Moreno.
"Lo pidió tanto que yo no he vuelto a trabajar en Supervivientes, ese es el tema", aseguraba muy molesta.
Otra afectada por los aires de grandeza de Rocío Flores también resultaba ser Isabel Rábago, que se mostraba muy clara al respecto.
Alejandra Rubio sigue los pasos de Rocío Flores
"Me preguntan si voy a coincidir en plató con Rocío Flores… y yo digo: ¡Cómo voy a coincidir yo con una estrella si yo soy una simple currito que trabaja cuando la llaman, por Dios", sentenciaba.
"Mi contestación es puro cachondeo", aclaraba poco después a sus seguidores. "No tengo ni idea si ha vetado o no a nadie. Sinceramente, tampoco me importa".
"No me aporta ná y esas cosas no dependen de mi. Yo soy una currito es decir: nadie. Me acabo de enterar que va a ir al programa y me ha hecho gracia. A mi plim", remarcaba.
Sin embargo, y lamentablemente para ella, los días de reinado de Rocío en Telecinco parecen haber llegado a su fin. Y ha sido otra la que ha ocupado su sitio dentro de las filas de la cadena: nada menos que Alejandra Rubio.
La hija de Terelu Campos llegaba pisando con fuerza, colaborando los fines de semana en Viva la vida junto a su madre y su tía, Carmen Borrego.
Algo que daba para mucho, ya que daba pie a una auténtica guerra sin precedentes dentro del clan más mediático de la televisión.
Alejandra no dudaba en atacar a su tía públicamente y echarle en cara los trapos sucios familiares. Al menos, hasta que a María Teresa Campos le tocaba intervenir y poner orden en medio del caos.
Ahora que las aguas han vuelto a su cauce, la nietisima se ha topado con que necesita trabajo tras la cancelación de Viva la vida. Y una buena forma de conseguirlo es dando que hablar, por lo que incluso se animaba a ser entrevistada por su madre.
Una entrevista que no ha dejado a nadie indiferente y en la que la joven también ha puesto su voluntad. De hecho, vetaba a tres colaboradores deSálvamea los que no quería ver ni en pintura, lo que ha desembocado en todo un escándalo.
En concreto, fueron Laura Fa, Kiko Jiménez y Rafa Mora los repudiados, algo ante lo que no han tardado en saltar.
"Deja como el c*** a Terelu", acusan a Alejandra. "¡Fíjate lo bien que lo está haciendo que no nos interesa ni a nosotros!", opinaban respecto a su actitud en plató.