La nueva docuserie de Rocío Carrasco trae muchas novedades. Entre ellas, un cambio brutal en lo que pretendía ser la producción y montaje de la misma.
Quizás por los problemas legales que han acechado a La Fábrica de la Tele y que les ha obligado a cambiar de estrategia para evitarse problemas.
La productora ya fue demandada por Antonio David, que logró sacarles más de 80.000 euros de indemnización.
Y justo por ese motivo, Paolo Vasile también tomaba drásticas decisiones respecto a los presentadores que se han puesto al frente del formato.
Justo por eso, decidía apartar a Carlota Corredera, firme defensora de Rociíto, y que se encargaba de dirigir los debates durante la primera parte del documental.
En esta ocasión, la mejor opción terminaba siendo Jorge Javier Vázquez, a pesar las polémicas que ha estado protagonizando últimamente.
Parece que Vasile quiere evitarse más críticas y recuperar a la audiencia. Justo por eso no podía contar Corredera, a la que acusaron de haber impuesto un "régimen totalitario".
Mediaset se quita de en medio a Carlota Corredera y Rocío Carrasco
Y es que recordemos que la presentadora arremetía con dureza contra todos aquellos que manifestasen una opinión contraria a la suya. Tanto es así, que se ganaba el apodo de 'comisaria corredera'.
"Rocío Carrasco sacudió la conciencia colectiva de un país al que todavía le falta mucho para abrazar sin complejos la lucha contra todas las víctimas de violencia de género", comenzaba su alegato.
"Ella abrió un debate apasionante y difícil de digerir que a lo largo de tres meses se ha colado en todas las casas…", sostenía la presentadora.
"No imaginábamos el impacto social que ha tenido la serie. Esta era una serie pequeña, una terapia hecha tele".
Sin embargo, la docuserie terminaba llegando a miles de mujeres que decidían romper su silencio.
"Es la serie de las adolescentes que han hablado con sus padres, de los jueces que han hablado con sus hijas...", manifestaba Corredera.
"Es muy revelador ver quién se suma al carro de acusarnos de haber cometido errores después de que nosotros lo hayamos visto. Son los negacionistas", apuntaba en aquel momento empleando por primera vez el término.
"Hemos descubierto que los negacionistas se dividen entre los que han opinado sin ni siquiera haber visto la serie y los que de la noche a la mañana han decidido no hablar del tema, quizá para no darle la razón a Rocío Carrasco", les acusaba.
"O lo que es lo mismo: para no admitir que estaban equivocados. En cualquier caso es un gran avance, así que bienvenidos".
Desde entonces, la oleada de ataques a Corredera no dejaban de sucederse. Este hecho, sumado a las nuevas consecuencias que puede acarrearle a Telecinco la emisión de la docuserie, han provocado que tengan que darle un giro radical.
Así, han decidido convertirlo en un especial en el que Rociíto recreará la casa de Montealto, donde pasó su infancia y La Jurado pasaba sus últimos días.
Un viaje al pasado en el que Carrasco recordará algunos de los momentos más importantes de su juventud, incluída la marcha de su casa.
Eso, sumado a una recreación a gran escala de todas las estancias del que fuese su hogar. De hecho, saldrán a relucir detalles hasta ahora desconocidos como las cartas de amor que Antonio David Flores le escribía a Rociíto.
Eso, sin contar con la gran cantidad de objetos que darán vida al docureality. Poco a poco, iremos descubriendo lo que esconden cada una de las habitaciones de la casa de La Jurado.
Lo cierto es que esta nueva propuesta audiovisual llega meses después de la fecha de otoño inicialmente prometida en la segunda temporada, En el nombre de Rocío.
Queda claro que en esta ocasión la apuesta de la cadena por la hija de 'la más grande' será mucho más leve. Seis capítulos de poco más de una hora de duración si los comparamos con los de la primera parte.