Sergio Ramos y Pilar Rubio tienen sus días contados en Madrid. La renovación del capitán del Real Madrid sigue sin resolverse y la propuesta del club ha sido tan poco interesante que el jugador ha decidido rechazarla. Está esperando nuevas opciones, así que podrían ser sus últimos momentos en el equipo.
Con el mes de enero a punto de finalizar y con Luka Modric renovado, la continuidad de Sergio Ramos y Lucas Vázquez en el Real Madrid sigue en duda.
Sin llegar todavía a un punto de no retorno, las renovaciones del capitán y del hombre para todo de Zinedine Zidane van por un camino bastante complicado. La situación económica provocada por la pandemia tampoco ayuda lo más mínimo. Aunque parece que el club tampoco se está esforzando mucho en su continuidad.
Lo cierto es que los dirigentes del Real Madrid están inmersos en otros asuntos. Siguen con su batalla por cuadrar números, ajustar balance y evitar que las cuentas del club puedan arrojar cualquier tipo de déficit al final de la presente temporada.
Están intentando evitar la situación que está sucediendo en el Barcelona y sus millonarias pérdidas. Por supuesto, desde la entidad madridista tienen claro que no sucederá y que lo tienen todo bajo control. Lo que parece que no controlan demasiado o que están pasando por alto es que en pocos días pueden perder a dos grandes jugadores.
Florentino Pérez ya confesó en su momento que se conseguía evitar los números rojos al anteponer la cabeza al corazón en algunas decisiones, circunstancia que el club está llevando al pie de la letra con la renovación de Ramos que termina contrato el próximo 30 de junio.
Sergio Ramos abierto a escuchar nuevas ofertas
Las propuestas lanzadas desde el club, tanto a Sergio Ramos como a Lucas Vázquez, han sido rechazadas por los jugadores. A partir de ese momento no se ha producido movimiento en ningún sentido y todo está a la espera de acontecimientos.
Los jugadores no tienen ninguna esperanza, pero de momento ninguno de los dos ha anunciado su renuncia. Ramos y Vázquez están en su derecho de escuchar otras ofertas y esperar a la llegada de una propuesta mejor a la presentada por el Real Madrid.
Año y medio atrás, un grupo de los denominados grandes de Europa, llegaron a un pacto de no agresión en cuanto a fichajes de jugadores. Bayern, Real Madrid, Manchester United, Barcelona, PSG y Juventus se sumaron a una iniciativa que pretende que el mercado no se dispare y, sobre todo, que entre ellos ni compitan, ni se den golpes por la espalda.
La comunicación entre estos clubes es fluida. Son rivales, pero mantienen una estrategia común. Y más en tiempo de crisis, aunque la iniciativa es anterior a la crisis del coronavirus.
Un ejemplo claro de este pacto ocurrió el pasado verano, ya se respetó el pacto con Leo Messi y en el momento en el que el Barcelona se negó a negociar, City y PSG renunciaron a cualquier aproximación al jugador.
Con Alaba ha sucedido algo parecido y todos los movimientos alrededor del austríaco se iniciaron en el momento en el que el Bayern anunció que daba por terminada la negociación para la renovación de su contrato, momento en el que varios equipos, entre ellos el Real Madrid, empezaron a cortejar al defensa.
En las últimas semanas son varios los equipos que han llamado a los dirigentes blancos para hacerles llegar su interés por ambos jugadores. Por el momento no ha habido acercamiento alguno ni con Ramos ni con Vázquez, al menos de manera oficial y pública.
Si Sergio Ramos decide abandonar definitivamente a su actual equipo y escoger una nueva oferta, Pilar Rubio y el jugador se verán obligados a abandonar el nido que tienen construido en Madrid.
La presentadora se verá más afectada que Ramos, si cambian de domicilio y de localización. Actualmente trabaja en 'El Hormiguero' y, además, tiene a toda su familia en la capital. Antes del 30 de junio se hará público si se produce la renovación del capitán o no y podremos saber si hay nueva localización o la pareja se queda en Madrid.