Ortega Cano no gana para disgustos. Sobre todo, porque tras su última intervención en Viva la vida, y en medio de la vorágine familiar, al diestro le han llovido las críticas.
Inevitablemente, el padre de Gloria Camila y José Fernando perdía los papeles en pleno directo. Así, quedaba retratado después de gritarle de malas formas a su empleada del hogar, Marina.
"Marina, por favor, ¿me dejas? ¿Me deja usted, por favor?", saltaba de manera inesperada dejando a todos en plató impactados.
"¡Qué susto! Maestro, pensaba que me lo decía a mí", apuntaba Emma García. Mientras que Ana María Aldón no sabía donde meterse, bajando la mirada avergonzada con el comportamiento de su marido.
"A mí me extrañaba que me chillase así", comentaba la presentadora a continuación. "No, yo no soy persona agresiva para nada", se excusaba inmediatamente Ortega Cano.
"Yo he entendido que estabas tan nervioso que has terminado perdiendo los papeles", intentaba dar la cara por él Emma.
Sin embargo, ese breve instante fue suficiente para que las redes prendiesen fuego. "Pues viendo como trata Ortega Cano a Marina, su empleada de hogar, ya no necesitamos saber más. De verdad, muchas gracias al torero y a José Antonio. Vuestras intervenciones os retratan".
"José Ortega pierde los papeles del camión en directo. Ese y el libretas idénticos y todos son cavernícolas. Dan mucho asco", le acusaban.
Ortega Cano, en el punto de mira
Y la polémica ha seguido después de que Ana María Aldón, mujer de del torero, obligase a Marina a disculparse públicamente.
"Qué forma tan patética de perder la dignidad! Ahora toca decir estupideces para ¿limpiar? la imagen del hombre de la casa", apuntaba una usuaria en Twitter.
"No es que cojamos las cosas con pinzas, es que ya conocemos el juego. Esa imagen no la limpia ni miles de Marinas".
"Vengo de Instagram y me traigo esto. ¿No se cansan?", alegaba otra. "Después de sacar en sus stories a Marina teniendo que culparse a sí misma de la violencia verbal de Ortega Cano, llega el segundo capítulo de exposición innecesaria".
"El ambiente en esa casa es tóxico", arremetían con dureza. Y es que la actuación de Ortega ha sido desaprobada incluso por su propia hija.
Gloria Camila dejaba muy claro que no estaba de acuerdo con que su padre entrase en Viva la Vida.
"Entonces yo llamo a Marina y le digo que cuelgue el teléfono y le digo que haga lo que tenga que hacer", contaba la joven. Sería en ese preciso momento cuando el diestro perdía los nervios, ya que se sentía presionado por su empleada.
"No soy partidaria de que mi padre entre en los programas. Diga lo que diga la historia se va a contar. Así que mejor ver, oír y callar y luego gestionarlo. Él no quiere más disgustos ni nada. Lo que quiere es hacer su vida", insistía.
Por otro lado, Gloria también criticaba la intervención de su tío José Antonio. "Mi tío estuvo desacertado en llamar al programa, eso es obvio".
"Era un terreno en el que no tenía que hacer la llamada. Había ocho personas que no iban a opinar como él opinaba", reconocía.
"A pesar de ello, cree que no se portaron bien con él. Creo que también el respeto se le faltó en muchos momentos".
Rocío Carrasco se atrevía a señalar que Ortega Cano funciona bajo coacción. "Con él sí funcionan las amenazas, por lo que yo he visto 'el ser' le amenaza con contar cómo fue la adopción de los niños públicamente".
Mientras que la colaboradora de Ya son las ocho se atrevía a argumentar que su padre "está harto de que siempre le salpiquen los conflictos familiares, de los que él ha intentado mantenerse al margen en los últimos años".