El recortador aragonés David Cortés ha perdido la visión de un ojo por una cornada y sigue ingresado con pronóstico muy grave. El joven sufrió una cogida durante la exhibición de recortadores del Puerto de Sagunto, celebrada el domingo en la localidad valenciana.
David, natural de Albalate del Arzobispo (Teruel), fue campeón de recortadores de toros en Zaragoza en 2009. En aquella ocasión se impuso al madrileño Jesús Benito ‘Chispas’. Poco después decidió retirarse, y había vuelto a los ruedos este verano.
El domingo se encontraba en Puerto de Sagunto, en una exhibición de recortadores con reses de la Ganadería J. V. Machaconses. El recinto taurino se había llenado para ver las habilidades de los especialistas, entre los cuales se encontraba el retirado David Cortés.
En un momento de su actuación, el recortador aragonés quiso realizar un quiebro pero el toro adivinó sus movimientos. El animal lo lanzó al suelo y le propinó una cornada que le alcanzó el globo ocular. Se vivieron escenas de pánico entre los asistentes al espectáculo.
La cogida se produjo cuando David estaba recordando un novillo de la citada ganadería. Los presentes recordaron al instante la cogida que sufrió hace diez años el matador Juan José Padilla, en Zaragoza. El torero también sufrió una grave cornada en el ojo.
Davis Cortés fue trasladado al hospital de la ciudad de Valencia con una cornada en el muslo y otra en el globo ocular. Fue intervenido quirúrgicamente durante más de diez horas. Finalmente no pudo salvar la visión del ojo, y sigue con pronóstico muy grave.
La noticia ha causado una gran consternación entre los que presenciaron el dramático momento. También entre el mundo del toro, donde David se ha labrado una merecida fama. Es muy conocido y cuenta con un gran prestigio gracias a su exitosa carrera.
La habilidad de David como recortador
Los recortadores son toreros que esquivan al toro con la única ayuda de su cuerpo. Se trata de una especialidad dentro del mundo del toreo, consistente en la agilidad física del recortador. Debe sortear a la res haciendo recortes, saltos y quiebros laterales.
La de los recortadores es una tradición centenaria que tiene su apogeo en las fiestas populares. Se celebra en las calles o en las plazas de toros, y también existen concursos. Es una versión más suave del toreo, ya que en este caso el animal no sufre ningún daño.
Cada año se celebra en España un campeonato para escoger al mejor recortador del país. Los mejores recortes son aquellos en los que el torero permanece más tiempo parado tras el quiebro. Y aquellos en los que sale airoso sin apenas correr o andando.
David Cortés recortador
David Cortés se hizo un lugar en este mundo y alcanzó la cima en 2009, en Zaragoza. En los vídeos que circulan por internet se pueden apreciar sus habilidades frente al toro. Ahora tendrá que centrarse en su recuperación, tras la peor cornada de su vida.
Juan José Padilla en el recuerdo
Al observar la gravedad de la cogida a David Cortés, muchos se acordaron de la de Juan José Padilla el 7 de octubre de 2011. La brutalidad de aquella cornada sigue siendo recordada en el mundo del toreo como una de las más graves. Fue durante la Feria del Pilar, en la plaza de Zaragoza.
La res empitonó al torero y le perforó el rostro con el asta ante el pánico de los presentes. El 'Ciclón de Jerez' se levantó del suelo cubriéndose con las manos el rostro ensangrentado. En la enfermería, los doctores no daban crédito, y aseguran que es lo peor que han visto en sus carreras.
El cuerno había entrado por el maxilar superior posterior y el torero presentaba síntomas de asfixia. Tras estabilizarlo, lo trasladaron al hospital donde fue intervenido durante más de cuatro horas. Tenía el ojo destrozado y no consiguieron salvarle la visión, pero que estuviera vivo ya era un milagro.
Diez días después recibió el alta, y volvió a los ruedos al cabo de un año. La suya fue una demostración de superación que le mereció un lugar entre los héroes del toreo. Su ejemplo le puede servir a David, el joven recortador que también ha sufrido una grave cornada en el ojo.