El documental 'Rocío: Contar la verdad para seguir viva' está arrojando luz sobre algunas de las cuestiones que han estado en el aire durante los últimos 25 años de la vida de Rocío Carrasco. El motivo del distanciamiento con sus hijos, el infierno que vivió junto a Antonio David Flores y la ruptura definitiva con el resto de su familia son los temas clave del testimonio de la hija de 'la más grande'.
En los últimos episodios emitidos el domingo 4 de abril, Rocío Carrasco adelantó uno de los principales motivos por el que la relación con su familia comenzaba a hacer aguas. Tras el accidente de coche, Fidel fue señalado como culpable e intentaron alejarlo de Rocío, lo que provocó una serie de disputas familiares. Con este caldo de cultivo ya instalado en la familia, el fallecimiento de Rocío Jurado y su herencia fue la gota que provocó la ruptura definitiva entre Rocío Carrasco y la familia Jurado-Mohedano.
El distanciamiento entre Rocío Carrasco y Ortega Cano
Durante el tiempo que Rocío Jurado y Ortega Cano estuvieron casados, la relación con Rocío Carrasco se podía considerar buena. Tanto fue así que incluso el diestro defendió públicamente a la hija de su mujer ante los malos tratos sufridos por Antonio David Flores. Pero todo cambió cuando la cantante falleció en 2006.
En la actualidad, la relación entre Rociíto y Ortega Cano está más que rota y prueba de ello han sido las declaraciones que Rocío hizo en el documental donde señaló que no estaba muy segura de que hubiera sido una buena idea que su madre se casara con él. Aunque todavía no se ha pronunciado sobre el origen real de este distanciamiento, el hecho de que el diestro fuera uno de los encargados de echar a Fidel Albiac de su casa tras el accidente, no gustó nada a Rocío Carrasco.
Ahora, la revista 'Diez Minutos' publica en exclusiva la que podría ser la verdadera causa de este enfrentamiento señalando la venta de una casa que Rocío Jurado tenía en Miami y que su hija decidió vender cinco años después de su fallecimiento.
Ortega Cano quiso impedir que Rocío Carrasco vendiera la propiedad
Corría el año 2005 cuando Rocío Jurado decidió comprar un apartamento en Miami. Según publica la citada revista, se trataba de una de las propiedades más queridas por la cantante donde se refugiaba y pasaba grandes momentos junto a Ortega Cano. Cuando le detectaron la enfermedad, Miami se convirtió en el lugar perfecto donde hallar paz y aceptar lo que estaba por llegar.
Cuando en 2006 'la más grande' falleció, Rocío Carrasco heredó esta propiedad. En más de una ocasión había viajado a Miami, pero no acabó gustándole tanto como para mantener el apartamento. Así que pensó en venderlo. Ortega Cano se negó en rotundidad a que Rocío Carrasco se desprendiera de la propiedad, no solo por los recuerdos que tenía del lugar sino también por una cuestión económica. Cuanto más se tardara en vender más dinero podría obtener de beneficio.
Rocío Carrasco desoye a Ortega Cano y vende
A Rocío Carrasco poco le importaba si la venta acelerada del apartamento de Miami no suponía un negocio. Consideraba que, sin la presencia de su madre a la que realmente le gustaba la ciudad, no tenía sentido seguir manteniéndola. Así que decidió venderla en 2011. Tal y como publica 'Diez Minutos', esta venta supuso una pérdida de dinero respecto a la venta inicial del apartamento.
Rocío Jurado compró la propiedad en 2005 por un valor de 875.000 dólares. Tras su fallecimiento, Ortega Cano aconsejó a Rocío que esperara unos 10 o 15 años para venderla, ya que se trataba de una inversión de futuro. Pero Rociíto no le hizo caso y la vendió en 2011 por 870.000 dólares perdiendo 5.000 dólares respecto a su valor inicial y sin conseguir beneficio alguno por la venta.