Paz Padilla se ha metido en un pequeño lío con la policía tras celebrar una fiesta en su casa. Aunque el origen de la celebración era muy emotivo, lo cierto es que no ha terminado de la mejor manera posible.
La humorista está viviendo unas fechas especialmente complicadas a raíz del fallecimiento de su marido. El gran amor de su vida que perdió la vida hace ya un año víctima de un tumor cerebral que le habían diagnosticado unos meses atrás.
Este pasado domingo 18 de julio, se ha cumplido un año desde la muerte de Antonio Juan Vidal. Una tragedia que Paz Padilla está intentando superar gracias a su gran sentido del humor y a sus creencias positivas sobre la muerte.
La también actriz de La que se avecina se ha convertido en toda una experta en la materia, llegando incluso a escribir un libro sobre cómo afrontar las pérdidas más duras. Un método que se basa en la aceptación de la muerte como una fase más de la vida, viviéndola con naturalidad y sin miedo.
"Yo no he dejado de sonreír, ha fallecido mi marido, pero no se me han quitado las ganas de vivir, ni el humor, hay que dejar paso a todas las emociones. Lloro, al igual que río, pero igual que viene, se va. Si algo me ha dejado Antonio es el no tenerle miedo a la muerte", decía la madre de Anna Ferrer en su regreso al plató del Deluxe.
Paz Padilla organiza una fiesta para rendir tributo a su marido, Antonio Juan Vidal
Fruto de todas las lecciones que ha aprendido durante estos meses sin su marido, la humorista ha celebrado este pasado fin de semana una gran fiesta en su casa en Madrid.
Con el objetivo de rendir un sentido y divertido homenaje a su alma gemela, la gaditana aprovechó para convocar a familiares y amigos a una atípica celebración de la muerte.
Lejos de organizar una misa funeral o un sobrio encuentro vestida de luto, la comunicadora optó por una fiesta de disfraces para recordar a su marido.
Consciente de que Antonio Juan Vidal quería ser recordado con felicidad y alegría, la actriz ha dado lo mejor de sí para cumplir el deseo de ambos. Y es que ella ha decidido sonreírle a la vida a pesar de que la ausencia de su marido sigue doliendo en lo más profundo de su corazón.
Tal y como ya había sucedido durante el funeral, la música y los bailes se convirtieron en los protagonistas del acto.
Las lágrimas en esta última ocasión fueron por dentro, puesto que era hora de rendir un homenaje a lo grande. Incluso contrataron una charanga para amenizar la fiesta, según pudimos ver en algunos de los stories que compartieron Paz Padilla y su hija Anna Ferrer a través de sus redes sociales.
Sin embargo, no todo salió como la presentadora de Sálvame esperaba y deseaba. La fiesta se vio interrumpida por la Policía Local de Villaviciosa de Odón, cuyos agentes se personaron en el chalé de la gaditana por el ruido que había en el interior.
La policía irrumpe en la casa de Paz Padilla por los ruidos de la fiesta homenaje
A pesar de que la fiesta se estaba celebrando en pleno sábado, todo hace indicar que los vecinos de la humorista no estuvieron muy conformes con la celebración.
Algunos habitantes de la urbanización se pusieron en contacto con la policía local de la zona para manifestar su desaprobación con los ruidos procedentes de la casa de Paz Padilla. Una denuncia que llevó a varios agentes a desplazarse hasta el domicilio para comprobar el nivel de ruido.
Fue la propia madre de Anna Ferrer quién atendió a las autoridades policiales cuando llegaron al domicilio, saliendo a la puerta para dar la cara.
Presumiblemente, le habrían pedido a la presentadora de Mediaset que bajase la música para permitir el descanso de sus vecinos. Una orden que Paz Padilla habría acatado sin ninguna oposición, ya que los agentes no tardaron en abandonar la propiedad.