Pipi Estrada en un acto promocional

Pipi Estrada publica un vídeo suyo y confirma que no pasa por su mejor momento

El periodista está siendo muy criticado en las redes

Pipi Estrada lleva bastante tiempo alejado del mundo del corazón, sin embargo es un personaje muy polémico que de vez en cuando acostumbra a liarla mucho. El periodista ya se ha metido en varios escándalos. Recientemente salieron a la luz unos audios suyos muy subidos de tono.

No solo en lo privado, sino que también en lo profesional ha metido varias veces la pata. Hace unos meses anunció en Twitter el fallecimiento de Michael Robinson varios días antes de su pérdida. Fue el propio Robinson el que le contestó al mensaje diciéndole que estaba vivo.

Ahora Pipi Estrada ha vuelto a revolucionar las redes, y esta vez ha sido por el polémico y macabro vídeo que ha subido. El colaborador de 'El Chiringuito' aparece totalmente roto y hundido, llorando una muerte muy cercana, la de su gato.

«Aquí estoy con mi Trapito, ha llegado el final... No sé qué ha pasado, pero de repente se cayó a la terraza de abajo, le cogí... Pero no ha podido superar el momento», explica entre lágrimas mientras acaricia al animal muerto. La dureza de las imágenes está al ver el pobre animal sin vida tumbado en una camilla.

El polémico vídeo de Pipi Estrada

El vídeo ha sido muy criticado en las redes, ya que su contenido no es muy apropiado, pues aparece un animal muerto. La tristeza de Pipi es evidente, él estaba muy unido a su gato. «Trapito, descansa, has sido siempre un gato muy bueno. Te quiero. Es la vida, hay que seguir peleando, no queda más remedio. Las mascotas son lo mejor que tenemos en esta vida», ha dicho Pipi.

Lo surrealista del vídeo es el final. Pipi Estrada finaliza el vídeo entre lágrimas y se levanta para coger el dispositivo con el que ha grabado las imágenes. En ese preciso momento se oye la voz de la persona que estaba grabando, teóricamente el veterinario, diciendo que «o, no lo he cortado. No he cortado todavía». 

«¿Está vivo?», preguntó Pipi tras no haber entendido lo que le decía el veterinario. «No, no, que no lo había cortado, digo», repitió el veterinario, afirmando que se refería a la grabación.