Paz Padilla després del funeral de la seva mare, el 12 de febrer de 2020

A la luz la enfermedad de Paz Padilla: Por eso no bebe

La presentadora de 'Sálvame' padece el Síndrome de Gilbert desde hace varios años

Paz Padilla després del funeral de la seva mare, el 12 de febrer de 2020
Paz Padilla no prueba el alcohol debido a una enfermedad | España Diario

No es habitual que se hable de Paz Padilla, sin embargo si vinculación con 'Sálvame' en los últimos años ha provocado que saliesen a la luz diversos aspectos de la vida privada de la presentadora.

Hace ya varios meses, la actriz le confesaba a Bertín Osborne en una entrevista para 'Mi casa es la tuya' que  había mucho tiempo que no probaba ni gota de alcohol  después de que rechazase una copa de vino ofrecida por el cantante.

¿El motivo?: Paz Padilla tiene el Síndrome de Gilbert, un trastorno que afecta tan solo a un 10% de la población. Se trata de un trastorno del hígado producido por el aumento de la sangre de la bilirrubina y que se manifiesta en la piel a través de una pigmentación amarillenta. A pesar de que no es una enfermedad grave, lo cierto es que hay que tenerla vigilada para evitar que afecte a otros órganos.

Se trata de un trastorno benigno que además de manifestarse en la piel también puede hacerlo a través de los ojos, dotando a las conjuntivas de un color amarillento. Sea como fuese, Paz Padilla, y otros rostros conocidos de Mediaset como Jordi González, sufren este síndrome que se suele manifestar a través de una serie de estímulos como el  ejercicio físico, el estrés, el insomnio e incluso algunas infecciones.

Eso sí, el Síndrome de Gilbert es una enfermedad que tiene como principal característica los bajos niveles de una enzima que puede llegar a aumentar los efectos secundarios de determinados medicamentos, especialmente aquellos relacionados con tratamientos con quimioterapia o para combatir el VIH.

Debido a esta enfermedad, y a pesar de no realizar ningún tipo de tratamiento, la gaditana intenta llevar  una vida más o menos sana y una dieta equilibrada, además de realizarse diversos chequeos médicos al año. Unos pasos que también sigue su hija Anna, ya que la enfermedad es hereditaria.