Ana Soria y Enrique Ponce ocupan cientos de titulares, mientras que Paloma Cuevas ha preferido mantenerse en un segundo plano, alejada de los medios y también de la polémica. La feliz pareja acaba de anunciar su boda para 2021 a falta de llegar a un acuerdo con Paloma Cuevas para firmar el divorcio.
Según fuentes cercanas a la pareja, el aún matrimonio se encuentra estableciendo las últimas pautas de su divorcio. La intención de ambos desde el principio ha sido ir de mutuo acuerdo y evitar el contencioso, pese a que el torero y la modelo están viviendo esta situación de manera totalmente diferente.
Totalmente alejada de los medios y con una discreción que no ha demostrado tener Ponce, Cuevas vive este momento amargo rodeado de los suyos y confiando plenamente en el abogado que comparten con el fin de redactar un convenio regulador que se presentará en septiembre, según lo previsto.
Al parecer, la modelo ya tiene decididas sus condiciones y estas son totalmente asumidas por Ponce. La susodicha quiere la custodia total de sus hijas, aunque permitirá que el padre pueda verlas sin problema. Además, también ha solicitado vivir en el domicilio conyugal.
Por el contrario, Enrique Ponce se mudará a una fabulosa casa, aún en construcción, en la urbanización de La Finca. El terreno se lo regaló Victoria a su hija sin embargo todo parece indicar que lo disfrutará el torero acompañado de su actual pareja, Ana Soria, quién estudiará en Madrid este año tras renunciar a su plaza Erasmus por amor.
El matrimonio formado por Cuevas y Ponce pronto finalizará tras tomar las medidas más urgentes como puede ser la pensión alimenticia o el régimen familiar y también se dejará pendiente la liquidación de gananciales.