Olga Moreno lo ha conseguido. Tras meses de dura convivencia en los Cayos Cochinos, afrontando durísimas condiciones meteorológicas y pruebas imposibles, la mujer de Antonio David se ha posicionado como cuarta finalista de Supervivientes.
Todavía ajena al drama en el que sigue inmersa su familia tras el huracán de la docuserie de Rocío Carrasco, la diseñadora se ha mostrado bastante positiva a su llegada a España.
"Estoy emocionada, melancólica, encantada de estar aquí, de haber llegado donde he llegado. Estoy muy feliz y muy contenta. Hemos dejado una vida atrás y volvemos a renacer", señalaba como toda una declaración de intenciones.
Y es que Olga viene con ganas de plantarle cara a su gran enemiga, Rocío Carrasco, que no ha dudado en arremeter contra ella. Sobre todo, por las mentiras que según ella ha contado acerca de su faceta como madre.
Por ejemplo, las ocasiones en las que hicieron ver a sus hijos que no se preocupaba por ellos o cuando se atrevió a insinuar que se negó a saludar a David Flores.
"Tengo una sensación de felicidad. Hacía mucho tiempo que no tenía esta sensación. Me da mucha pena que se acabe. No sé qué me espera fuera, pero lo voy a llevar con una sonrisa siempre", anunciaba la mujer de Antonio David ilusionada.
La cruda realidad que le espera a Olga Moreno tras su vuelta a España
Por su parte, Carrasco tiene muy claro que Moreno le debe su concurso a ella. Ya que no ha hecho otra cosa que lanzarle indirectas y hablar constantemente de sus hijos.
"Es una superviviente nata. Lleva 20 años sobreviviendo de mi sufrimiento sin importarle nada", sentenciaba. Además, Rociíto daba a entender que podría tener intención de tomar medidas legales.
Pese a la situación que le espera a la vuelta, Olga se ha encontrado con una gran decepción nada más pisar España. Y es que su querida 'Rora' la ha dejado plantada.
Rocío Flores no estaba para darle un abrazo y recibirla como se merece, pese a haber sido su mayor defensora todo este tiempo. La joven se ha tomado un tiempo de descanso junto a su novio, Manuel Bedmar, y ha puesto tierra de por medio en el momento más importante para la concursante.
Como era de esperar, quien tampoco ha estado presente ha sido su marido, Antonio David, a quien parecen haberle cerrado por completo las puertas de Telecinco tras la docuserie.
Al ex guardia civil le despedían en marzo y desde entonces no ha vuelto a pisar un plató de televisión. Sin embargo, Olga si que se ha llevado una sorpresa de lo más bonita y especial, ya que la esperaban dos miembros de su familia.
"¿Qué hacéis aquí? No me lo puedo creer", exclamaba emocionada y sin poder contener las lágrimas al ver a su hermana y su sobrina.
Por su parte, la nieta de 'la más grande' ha recurrido a las redes sociales para mostrarle todo su apoyo. "Sentimientos a flor de piel. Muchos nervios y mucha, mucha ilusión. Te lo mereces Olga", compartía en Instagram.
Hace poco, la diseñadora volvía a mostrar el gran cariño que le tiene a David Flores, a quien también ha echado muchísimo de menos. Así, volvía a darle a Rociíto donde más le duele, recordándole nuevamente que ella ha ejercido de madre estos últimos años.
"Mi amigo, mi tesoro, mi niño, mi ángel", ha comenzado diciéndole al hijo de su marido. "Siempre estaré a tu lado, eres muy muy grande. Te quiere tu Oa".
Y es que a la empresaria ya le queda muy poco para poder volver a abrazarle, algo que Carrasco sigue sin poder hacer.
Tal y como señalaba el propio Antonio David, él tiene algo con lo que su ex no cuenta pese a que haya roto su silencio. Y es el cariño de sus hijos. "Duermen a mi lado todas las noches".