Olga Avellán, escritora y periodista alicantina, falleció en la madrugada del domingo a los 41 años, víctima del cáncer de mama. Una enfermedad que le había sido diagnosticada a mediados de 2019.
Olga Avellán había destacado en su carrera periodística como autora de relato corto y, sobre todo, por el libro Mi mamá no tiene pelo. Este es un cuento que versa sobre cómo hablar a los menores de la enfermedad de un familiar. Un libro que escribió basándose en su propia experiencia con su hijo Alejandro, y fue sacado al mercado el año pasado.
Olga Avellán había desvelado su batalla contra el cáncer en abril de 2020, poco tiempo más tarde de dar a luz a su segunda hija. Era una época de confinamiento total y la escritora se había quedado embarazada poco antes de que le diagnosticaran la enfermedad.
Olga Avellán fallece a los 41 años víctima de un cáncer de mama
El caso es que Olga Avellán siguió con el embarazo para adelante y esta contó que, tras el nacimiento de la pequeña Andrea, iba a volver con el tratamiento. Y es que durante la gestación, Olga tuvo que adaptar dicho tratamiento al embarazo.
Casada con Andrés Maestre, Olga Avellán ha seguido escribiendo hasta el final de sus días. Además, Olga acudía a diferentes eventos culturales y también se mantenía activa a través de su blog. La última entrada del mismo fue publicada el pasado 17 de enero, y es un sentido relato corto titulado Las flores vulnerables.
La muerte de Olga Avellán provocó una gran conmoción en el periodismo y la cultura. Entre otras personalidades políticas, la diputada provincial de Cultura de Alicante, Julia Parra, manifestó su dolor por su fallecimiento.
Su libro más especial: 'Mi mamá no tiene pelo'
Cuando escribió este libro, Mi mamá no tiene pelo, su objetivo fue ayudar a asimilar historias parecidas a los niños, pero no solo eso. También quería recaudar fondos para destinarlos a la investigación de la detección temprana del cáncer. La historia la narra Andi, un niño cuya madre sufre cáncer de mama.
Olga Avellán explicaba hace medio año en una entrevista para EsDiario que el proyecto "nace de la necesidad que yo tenía de poder explicarle a mi hijo lo que estábamos viviendo en casa debido a mi enfermedad".
"Me diagnosticaron un cáncer de mama muy agresivo, que me llevó a una mastectomía de urgencia y a un tratamiento intensivo que me debilitó mucho. Eso hizo que nos distanciásemos y que él me viese en un estado enfermizo y débil", confesaba Avellán.
"Cuando mi marido y yo nos percatamos de lo afectado que estaba nuestro hijo buscamos ayuda para poder ayudarlo a él. Lo hicimos a través de cuentos, como hicimos otras veces en otros momentos de cambio en su vida, con los pañales o la comida. Eso me ayudó a recopilar ideas y a empezar a crear mi propia historia", desvelaba Olga.
"Aceptar la realidad que viven para darle mayor fluidez en el ámbito familiar"
Contaba Olga que su hijo entendió su enfermedad y fue una "aceptación de la realidad que viven para darle mayor fluidez en el ámbito familiar. Una vez que el niño acepta que la madre está enferma, empatiza con ella. Y resulta mucho más fácil para ambos sobrellevar la enfermedad y sus consecuencias", revelaba.
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Para Olga, este libro ayuda a "reforzar el vínculo entre madre e hijo que se había visto debilitado por la enfermedad. En el cáncer el estado de ánimo es crucial y es fundamental proporcionar los elementos necesarios para esa estabilidad. Cuando una madre ve a su hijo contento, la enfermedad se lleva mejor", concluía su explicación.