Samantha Vallejo, Pepe Rodríguez y Jordi Cruz, miembros del jurado de 'Masterchef'

El motivo real de la gran bronca de ayer jamás vivida en la historia de 'MasterChef'

Los aspirantes trabajaron a gritos y con más presión que nunca

El último programa de 'MasterChef' ha estado marcado por algunas broncas inesperadas, que han llegado en un momento crucial del talent culinario, a las puertas de la final de la edición.

En el programa número 11 de esta edición se ha vivido una de las broncas más sonadas. Todo empezó en la prueba de exteriores, que anoche fue un homenaje a todos los voluntarios de la Cruz Roja y al trabajo que han hecho y siguen haciendo desde que se desatara la crisis del coronavirus.

La labor de los aspirantes consistía en preparar 150 menús que se repartirían entre 150 de las miles de personas a las que Cruz Roja da alimentos cada día. Ana y José María fueron elegidos los capitanes de la prueba, pero para elegir a los aspirantes que cocinarían en su equipo tendrían que pujar por ellos.

Durante esta prueba, el diseñador Lorenzo Caprile se pasó por las cocinas. Y es que, además de diseñador, durante la cuarentena se convirtió en voluntario, ayudando a las familias más precarias a aguantar los perjuicios económicos del coronavirus.

Lorenzo Caprile les canta las cuarenta

«He estado colaborando desde que empezó este horror, y cuando sales a repartir te das cuenta de que no hace falta irse al tercer mundo para ver cosas así, que el horror está al lado de casa y hay mucha gente que no tiene absolutamente nada. Al cocinar, pensad que a lo mejor mañana puede ser vuestra familia», explicó Caprile.

Después de todo esto vino uno de los momentos más tensos del programa. «A ver, sé que este no es mi programa, pero esto es Cruz Roja, yo soy voluntario y no voy a permitir que las personas que están esperando esta comida coman a destiempo, ¿me estáis oyendo? Os veo con una pachorra tremenda, ¿pero os dais cuenta de la prueba que estáis haciendo?», estalló el diseñador con unas palabras que dejaron a todos los aspirantes mudos.

El motivo real de esta bronca, es que Caprile está muy concienciado con ayudar a los más desfavorecidos, y bajo ningún concepto quería quedar mal con ellos. El diseñador pretendía que todos los menús llegasen a tiempo para que nadie más tuviese que esperar más tiempo para poder alimentarse.

Las palabras de Caprile han causado un revuelo en las redes sociales, ya que se le vio muy nervioso y muy implicado en la causa, tanto que incluso llegó a gritar a los concursantes para que se dieran más prisa. Finalmente, todo salió según lo previsto y pudieron hacer los menús a tiempo, Caprile incluso echó una mano a los aspirantes y se puso a pelar patatas.