José Ortega Cano, viudo de la gran Rocío Jurado, está atravesando uno de los momentos más complicados de su trayectoria mediática. Según ha salido publicado, la prensa del corazón le ha dado la espalda y se ha posicionado a favor de su gran enemiga: Rocío Carrasco. Afortunadamente disfruta del apoyo de su esposa Ana María Aldón, una diseñadora que trabaja de tertuliana en Telecinco.
Ortega Cano empezó su relación con Ana María Aldón al tiempo de fallecer Rocío Jurado, su primera mujer, y hubo gente que criticó este atrevimiento. Sin embargo, la pareja hizo frente a las críticas con una gran maestría y poco a poco demostraron que su amor era real. Tienen un hijo en común, viven juntos y en ningún momento han pensado en separarse.
Ana María saltó a la fama por ser la mujer de Ortega Cano, pero actualmente brilla con luz propia y disfruta de una situación privilegiada. Cada vez tiene más trabajo en los medios de comunicación, de ahí que haya contratado a alguien para que le ayude en las tareas domésticas. Desde hace un tiempo la diseñadora contrató a Marina, una mujer que se ocupa del cuidado de su hogar.
El viudo de Rocío Jurado está encantado con Marina, quien se ha convertido en un miembro fundamental dentro de la familia. Ana María le graba constantemente y publica el contenido en las redes sociales, así que ha alcanzado una gran popularidad. Recientemente se ha puesto enferma y Ortega no ha tardado en coger su vehículo y llevarla a un conocido hospital madrileño.
José Ortega Cano ha formado parte de los sucesos más míticos de la crónica social, pero lleva un tiempo retirado en un discreto segundo plano. Según algunos periodistas, no tiene fuerzas para enfrentarse a su antigua hijastra Rocío Carrasco, quien está dispuesta a todo por destrozarle. Todo hace pensar que Rociíto le guarda cierto rencor por un motivo que saldrá a la luz más pronto que tarde.
José Ortega Cano cuenta la verdad: “La que está malita es ella”
Ortega Cano ha tenido que estar aislado porque su hijo pequeño dio positivo en coronavirus justo antes de la cena de Nochebuena. El torero ha estado completamente desaparecido, pero se ha visto obligado a romper su encierro por un motivo importante. Marina, la persona que trabaja en su vivienda, ha enfermado y él le ha tenido que llevar al hospital.
El marido de Ana María Aldón llamó la atención de todos los periodistas, pues nadie esperaba verle tan pronto y en tan buen estado. Se acercaron a él para preguntarle el motivo por el que visitaba el médico y fue completamente sincero. “La que está malita es ella, no yo”, explicó haciendo referencia a su empleada doméstica.
El torero ha guardado reposo hasta que los médicos le han dado el alta y poco a poco va recuperando su vida cotidiana. Según ha salido publicado, sus problemas de salud son cosa del pasado y ahora solamente tiene una preocupación: el nuevo documental de Rocío Carrasco. Recordemos que Rociíto está preparando una serie llamada En el nombre de Rocío que promete marcar historia.
Ortega Cano se refugia en Ana María Aldón
José Ortega Cano, según la gente que está cerca de él, es un hombre honrado que únicamente quiere el bien de su familia. Esa es una de las razones por las que ha conquistado el cariño de Marina, su empleada doméstica. Tienen una relación fantástica y todo hace pensar que se han convertido en grandes amigos.
Ana María está satisfecha porque ella debe pasar mucho tiempo fuera de su domicilio y quiere que el torero esté en buenas manos. El matrimonio goza de una salud envidiable y jamás han tenido ningún problema, a pesar de que haya gente que insinúe lo contrario. Forman un equipo indestructible y juntos lucharán contra Rocío Carrasco en los próximos meses.