Desde que la competencia de Telecinco les arrebatase uno de sus concursos más conocidos, 'Pasapalabra', los de Mediaset han sacado toda la artillería para que su estreno no tenga éxito.
Y si hay un programa que tiene potencia de fuego para luchar en esa trinchera, ese es 'Sálvame'.
El programa de Jorge Javier Vázquez ha puesto toda la carne en el asador con contenidos suculentos que coincidan con la hora de inicio del nuevo programa de Antena3.
Y para ello, utiliza todo tipo de cebos dejando las informaciones más atractivas para las 20:30 horas, con el objetivo de retener a su audiencia y torpedear a la cadena rival. Dentro de esta estrategia, las últimas semanas han querido desempolvar algunos materiales que eran inéditos y afectaban directamente a sus colaboradores.
Tras echar mano de alguna imagen pasada de Matamoros y algún audio sobre Belén Esteban, los aludidos parecieron no dar mucho juego ni estar por la labor de profundizar demasiado en polémicas.
Así que tiraron de un filón inacabable con una protagonista que nunca falla: Lydia Lozano y su escándalo por el caso Ylenia Carrisi. El gran error en su carrera periodística que tanto la tortura.
Lydia reacciona con llantos y amagos de abandono cada vez que el tema vuelve a salir a la palestra, cosa que ocurre recurrentemente cada pocos años.
Y el programa no deja pasar la ocasión de crear un espectáculo al respecto, con los demás colaboradores en primera línea y con el cuchillo entre los dientes para ponérselo un poco más difícil a la periodista.
Tal es el nivel de estrés y desesperación de Lydia después de que el tema Carrisi vuelva estar en el plató que su vida personal parece estar resintiéndose. Hasta tal punto le afecta que su marido, el tantas veces mencionado Charly, le ha pedido que deje Sálvame, según llegó a afirmar durante el programa. .
Eso sí, luego se afanó en aclarar que la petición había sido algo puntual.
Casi tres décadas de matrimonio
Lydia Lozano y Charly cumplirán en pocos días 30 años de matrimonio. Una cifra a la que no tanta gente consigue llegar. Y más en este sector donde la privacidad se halla tan expuesta.
Charly ha querido evitar históricamente aparecer en la pantalla. Y su mujer defiende su intimidad con uñas y dientes.Sin embargo, es recurrente que sea nombrado en el programa y los colaboradores suelen utilizar su figura para provocar a la periodista en numerosas ocasiones.