Belén Rueda se abrió en canal hace un tiempo en su visita a Mi casa es la tuya. En aquella ocasión, la actriz habló sin tapujos de la muerte de su hija María, de solo 11 meses.
"Paré el mundo. María nació con una cardiopatía y no hice nada de trabajo. Me dediqué a ella e intenté sacarla adelante, pero no fue posible, porque con 11 meses falleció", confesaba en su charla sincera con el presentador jerezano.
Fue en ese momento cuando Bertín le contó a Belén que sabe muy bien lo que es vivir ese duro episodio. Porque a él le pasó algo similar. "Consigues superarlo, pero nunca se olvida".
Y es que Belén Rueda siempre ha tenido claro que quería pasar mucho tiempo con sus hijas. "Nunca he estado más de 15 días sin verlas. No me arrepiento de haber rechazado trabajos porque iba a estar mucho tiempo sin verlas".
"Cuando rodé El orfanato pedí acabar siempre los jueves, rodábamos en Asturias. Y aunque fueran las dos de la mañana, cogía el coche y volvía a Madrid para estar con ellas", asegura.
Ahora, sus hijas ya tienen 22 y 26 años y Rueda afirma que "soy una mami guay, pero mami, no amiga guay. Tenemos mucha confianza y me cuentan muchas cosas, no todas porque no es necesario. Ahora es cuando me toca a mí y he podido hacer otras cosas", confiesa.
María nació fruto de su relación con Daniel Écija
Belén Rueda conoció allá por 1990 a Daniel Écija, productor de series tan conocidas como Médico de Familia o Los Serrano. Tras consolidarse su relación, tendrían tres hijas: Belén, María y Lucía. Pero no se casaron hasta el año 2003 y, casualidades de la vida, en 2004 se separaron.
Belén Rueda se rompió tras la muerte de María el 22 de mayo de 1997. Y tiró para adelante como pudo, siempre refugiándose en el trabajo. Hasta que llegó el día en el que la pareja decidió separar sus caminos de la forma más amistosa posible para ambos.
Belén Rueda, volcada en la 'Fundación Menudos Corazones'
A su vez, Belén Rueda está inmersa en la Fundación Menudos Corazones. La actriz es Presidenta de Honor, en apoyo de niños con cardiopatías congénitas, como la sufrida por su hija María.
En su artículo Algún día es hoy, incluido en el libro La mirada del paciente, la actriz dedica unas emotivas palabras a su hija María.
"En aquella prueba rutinaria te dieron una noticia para la que nadie está preparado: algo no estaba bien en la delicada arquitectura del corazón de tu bebé", dice el texto.
"Tu bebé sería uno de los diez que nacen cada día en España con cardiopatías congénitas. Tras el nacimiento en un gran hospital especializado en cardiología pediátrica, lo que serían unos pocos días de ingreso se transformaron en largos meses de complicaciones; un periodo sombrío de continuas cirugías y cuidados intensivos".
"La vida de un bebé, su bebé, que se va al cielo..."
El homenaje a su hija tiene fragmentos tan sensibles como estos. "Hasta que llegó el día en que ella se vio liberada de cables y goteros. Conoció el cielo abierto y entró en su casa, vuestra casa, por primera vez en nueve meses".
"Un segundo nacimiento. Hasta en el desierto crecen las flores", reza otro pasaje del escrito de Belén Rueda.
"Finalmente, la vida de un bebé, su bebé, que se va al cielo . Y Belén quiere que la ciencia acabe con esa enfermedad mortal que acecha a inocentes criaturas. Para que no sea más que una vieja memoria de un tiempo lejano", concluía el texto.
El vídeo del día: