Jorge Javier Vázquez señalando con el dedo

Crítica sin precedentes de Jorge Javier a 'Sálvame'

El presentador admitió cómo se siente al presentar el programa líder de las tardes de Telecinco

'Sálvame' se ha convertido en uno de los programas más vistos de la tarde. El espacio presentado por Jorge Javier Vázquez  empezó en sus inicios hablando de los personajes de la prensa rosa pero poco a poco  los colaboradores se fueron convirtiendo en los protagonistas de la tarde.

Los conflictos entre los propios compañeros y sus enfrentamientos dejaron en segundo lugar toda noticia relacionada con los personajes del papel couché dejando en evidencia que  no hay nada que enganche más a los espectadores que unos cuantos gritos seguidos de algún que otro descalificativo.

Este giro en el contenido es precisamente lo que el propio presentador criticó de 'Sálvame'. Jorge Javier admitió en directo no sentirse muy satisfecho con el programa que presenta donde casi se ha convertido en al artífice de los conflictos entre los colaboradores o el encargado de sacar el lado más escabroso y morboso de una noticia al ser esto lo que precisamente engancha a la gente.

Jorge Javier sabe lo que la gente quiere y eso es lo que da a pesar de que no disfrute con ello.  El catalán es consciente de que no hace un programa elegante y formal pero sabe perfectamente que es justo eso lo que lo diferencia de los demás programas  del corazón y lo que coloca a 'Sálvame' como uno de los programas más vistos de la cadena.

Toda una declaración de intenciones que sorprende a propios y extraños teniendo en cuenta la gran audiencia que cosecha día a día.  Poco importa el trasfondo de una noticia si lo que genera es polémica.

No es la primera vez que Jorge Javier se ha mostrado autocrítico en 'Sálvame' pues hace unos días estalló contra Antonio Montero y su discurso en defensa de Alfonso Merlos al considerar que estaba siendo perseguido por su ideología. Jorge no pudo reprimirse y espetó «ni un discurso más de VOX en este plató» e ironizaba añadiendo que  'Sálvame' era un programa «de rojos y maricones».