Jordi Cruz con los brazos cruzados en 'Masterchef'

Jordi Cruz, de 'Masterchef'', confiesa qué pasó con Tamara Falcó detrás de cámaras

'En el programa no he tenido ningún tipo de escarceo amoroso'

Jordi Cruz, uno de los chefs más estrictos de  'Masterchef', que consigue hacer temblar incluso a las celebrities más confiadas, también ha estado en el punto de mira muchas veces por su descarado tonteo con ciertas concursantes.

Y es que muchas veces saltaba a la vista que entre el chef y ciertas aspirantes, había bastante química que conseguía traspasar la pantalla. En concreto, fue más que evidente el tonteo que existía entre Tamara Falcó  y Jordi, lo que desató muchas habladurías al respecto.

Algo, que no hizo más que incrementarse con un beso en directo que llamó bastante la atención, aunque ellos mismos se encargaron de desmentir que existiese absolutamente nada entre ellos. De hecho, se rumoreaba que Jordi tenía novia en aquel momento. 

Ante eso, la hija de  Isabel Presysler prefiere limitarse a decir que «lo que pasó en Masterchef se queda allí». Además, explicaba que en ningún momento tuvo intención de ir a por el chef. «Como hubo aquel momento de cobra pues lo hice para terminar así, un beso y ya está», se limitaba a decir.

Según Tamara, ella vivió esa relación tal y como se podía ver en pantalla. «Se había metido mucho con él por la famosa cobra y me vine arriba, hasta yo me sorprendo. No te digo mi madre, que casi le da un parraque».

«Que conste que durante la grabación del programa él no tenía novia. Eso que conste. A la vista está que lo nuestro no ha continuado», añadía al respecto. Poco después, se hacía oficial el noviazgo de Jordi con la arquitecta brasileña Rebecca Lima.

Era ella la que lo confirmaba con una romántica imagen: «Tú eres. Lo sé. Lo supe. Te reconocí. Eres. Desde hace muchas coincidencias. Eres. Desde antes de encontrarte. Lo sé, amor. Eres tú», eran las bonitas palabras que le dedicaba. 

Por su parte, Jordi también se ha pronunciado en más de una ocasión acerca de ese pasional arrebato de Tamara que les pilló de imprevisto a todos. Aunque, el feeling llevaba palpándose desde el principio de la edición. «Fue un gesto espontáneo de Tamara. Estaba muy contenta con la victoria y tuvo ese arrebato de felicidad».

Además, el chef alegaba que era la justa ganadora del reality culinario. «Lo hizo mejor que los demás». A eso se suma que Jordi siempre ha alegado que ese gesto que tuvo Tamara no ha afectado a nadie de su entorno, dejando claro que no le molestó en absoluto a su novia.

Ahora, Jordi Cruz vuelve a pronunciarse y toca el sonado tema de sus escarceos amorosos en una entrevista exclusiva a la revista 'Lecturas'. En ella, apunta claramente que «no ha tenido ningún tipo de escarceo amoroso en el programa».

Aunque, eso no quita que algunas concursantes se hayan enamorado de él, o eso se ha especulado acerca de una aspirante gallega.

«Es una chica gallega que no está enamorada de mí, es una chica muy pasional por la gastronomía y quiere venir al ABaC porque está enamorada del concepto de mi restaurante», ha aclarado. Y, respecto a esos besitos inesperados que desatan rumores en el programa, el chef tiene muy claro a quien culpa.

«Eso es culpa de las celebrities, que son muy 'desinhibidas'. Ha habido ediciones donde te pones a vacilar y haces una coña marinera, pero yo no le he echado ni media coña a la aspirante de esta edición».

Por otro lado, Jordi asegura que desde que empezó en Masterchef se cuida más. «Presumido no, pero soy una persona de aprender. Y, aunque no me importa mucho mi imagen, cuando ves que te hacen algo que te sienta bien lo aprendes. Yo vestía muy mal».   

No cabe duda de que el chef pasa por una gran etapa, tan profesional, como personal, ya que su relación con Rebecca sigue viento en popa. Es más, su novia iba a verle en una de las ediciones para darle una sorpresa. «Fue una sorpresa maravillosa, apareció Rebecca y ¡qué bien! Soy tímido y me cuesta entender que mi vida sea interesante».

Por su parte, Tamara Falcó no puede ser más feliz al lado de su novio, Iñigo Onieva, quien parece haber encajado a la perfección en su vida.