Irene Rosales, junto a Amador Mohedano, Miguel Frigenti y Fani Carbajo, protagonizaron el programa de este jueves de 'Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition'. El punto cumbre de la cena llegó cuando Miguel Frigenti preguntó si el resto de asitententes habían tenido alguna vez sexo en público. La sorpresa llegó cuando Irene Rosales desveló que sí y contó su experiencia.
«He sido joven y me he acostado en un coche, en una vía de la carretera»
La mujer de Kiko Rivera confesó que sí habría mantenido sexo en público, pero no con su actual marido. El ser un personaje público implica que incluso podrían ser ‘pillados’ en pleno acto sexual, por lo que Irene descartó que esto sucediera en el futuro con su marido. «He sido joven y me he acostado en un coche, en una vía de la carretera. Dame un chupito…», ha dicho la colaboradora de televisión durante el programa.
Además, Rosales no ha tenido ningún problema en desvelar cuál era su postura favorita en la cama con su marido. La joven ha afirmado que esta sería «encima de él, pero de espaldas». Una confesión que no dejó indiferente a los invitados a su cena. Irene también aseguró que «una de las cosas que más me gusta que me regalen son flores y lencería, que me regalan poca».
«Lo mejor que tiene Kiko es que no tiene vergüenza de nada»
Su íntimo secreto se producía después de que Fani, Miguel Frigenti y Amador Mohedano entraran en su habitación y descubrieran un picardías negro. A Irene le encanta la ropa interior y hasta se la compra a su pareja: «A Kiko Soy yo quien se la elijo», ha comentado. Del cantante y DJ destaca lo que más le gusta: su desparpajo y su sentido del humor. «Lo mejor que tiene Kiko es que no tiene vergüenza de nada».
Finalmente, Irene también contó cómo habían sido sus comienzos con Kiko Rivera y cómo fueron sus amigos quienes le empujaron a comenzar una relación con el DJ. «Tuve un año de amistad con él. A mí me costó mucho… Teníamos un amigo en común. Él decía que yo era la más guapa de mi pueblo y me empezó a seguir. Entablamos una amistad de un año. Él me lo proponía, me lo tiraba, pero me daba mucho miedo», ha confesado.