Las elecciones en la Comunidad de Madrid del pasado 4 de mayo dejaron muy clara la palabra de la mayoría de madrileños: quieren un gobierno de derechas y así lo muestra el dibujo de la Asamblea que salió de las urnas. No tan solo por los 65 escaños del PP de Isabel Díaz Ayuso, sino también por el hecho de que la suma con los 13 de Vox rebasa de forma sobrada el umbral de 69, el necesario para la mayoría absoluta. Al otro lado del espectro político, 24 escaños para Más Madrid, otros 24 para el PSOE y 10 para Unidas Podemos.
Iglesias deja la política y se mantiene desaparecido... a excepción de la famosa foto sin coleta
Una formación, esta última, que se llevó buena parte de los titulares del día siguiente a los comicios. La misma noche electoral, su candidato y secretario general, Pablo Iglesias, presentaba su renuncia a ocupar un escaño en la Asamblea y anunciaba que dejaba definitivamente la política. Lo cierto es que, como candidato, había mejorado la representación de Unidas Podemos, que había pasado de 7 a 10 diputados, pero quedaba muy lejos de su verdadero objetivo: causar un revulsivo electoral tal que los morados se convirtieran en el principal partido progresista en la Cámara vallecana, con opciones de liderar un tripartito si la izquierda sumaba... pero nada más lejos de la realidad.
Iglesias se fue y desde entonces no se le ha vuelto a ver en público. Ni una entrevista, ni una declaración, ni un 'tweet'. No hay rastro de ninguna opinión pública del ya exsecretario general de Podemos. De hecho, lo único que ha transcendido en estos diez días es una imagen: la que publicaba 'La Vanguardia' este miércoles, después de que Iglesias hubiera optado por un cambio de 'look'. Efectivamente, el expolítico ha optado por cortarse su famosa coleta.
Íñigo Errejón lanza un dardo envenenado a Iglesias y Montero
Coincidiendo con el silencio, la desaparición pública de Pablo Iglesias, quien ha hablado sobre él ha sido su exmano derecha en Podemos, Íñigo Errejón. De todos es sabido que Iglesias y Errejón mantenían una estrecha relación de amistad, pero que la política y sus diferencias estratégicas les fueron alejando de manera progresiva, hasta que Errejón decidió abandonar la formación morada y fundar Más País. Ahora, tras años siendo uña y carne, ambos mantienen una relación fría y distante.
Sin embargo, Errejón no ha tenido problema en opinar sobre una de las cuestiones que muy a menudo está sobre la mesa en relación a Pablo Iglesias y a la ministra de Igualdad y pareja del exsecretario general de Unidas Podemos, Irene Montero. El líder de Más País ha participado en el primer capítulo de la serie documental '15-M ¿Generación perdida?', que emite Cuatro. Allí, la periodista Sonsoles Ónega no duda a preguntarle sobre el famoso chalé de 600.000 euros que Pablo Iglesias e Irene Montero se compraron en la localidad madrileña de Galapagar. «¿Fue una traición?», preguntó.
«No fue una traición, pero creo que fue un error. Lo entiendo en términos personales porque la presión que en muchos casos Pablo ha tenido ha sido muy dura, pero en términos políticos fue un error que mucha gente no entendió», respondió Errejón, con cortesía pero afeando el fallo a la pareja. El actual jefe de filas de Más País no dudó en señalar el origen de sus desavenencias con Pablo Iglesias, situándolo en las elecciones de diciembre de 2015, cuando Podemos se negó a formar una coalición con el PSOE.
«Se podría haber formado un gobierno con el PSOE o bien haber investido un gobierno socialista con nosotros como la pieza fundamental de la legislatura con 71 diputados. Se dejó pasar aquella oportunidad, en mi opinión erróneamente, y fuimos a una repetición electoral que España no quería y con mucha gente pensando que si no habíamos sido capaces de resolverlo a la primera, por qué íbamos a poder en la segunda», confesó Errejón, que también señaló como un fallo el acuerdo de Podemos con Izquierda Unida para la repetición electoral: «Nosotros teníamos cinco millones de votos, IU tenía uno y en vez de tener seis millones de votos tuvimos cinco, es decir, nos dejamos un millón de votos».
«Fue un error la repetición electoral y un error que un proyecto transversal que recibía el apoyo y la simpatía de gente que venía de lugares muy diferentes convertirlo en uno para los convencidos de izquierdas. El gobierno que no se hizo en enero del 2016 se ha acabado haciendo en muchas peores en 2020», zanjó el líder de Más País. Un alegato, pues, sobre una relación política y personal rota.