La factura de la luz se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los españoles. En los últimos meses no ha dejado de subir, y en estos últimos días ha rozado sus máximos históricos. Ni siquiera el cambio de tarifas que entró en vigor hace unos días ha solventado el problema.
La próxima factura que tengan que pagar los españoles será un problema para muchos de ellos. Especialmente ahora que el calor aprieta y los ciudadanos necesitan tirar de aire acondicionado y de ventiladores para aguantar. Por ese motivo, el Gobierno ya plantea nuevas propuestas para intentar frenar la escalada de precios.
Una de sus propuestas estrella será la reforma del sistema energético, pero para eso todavía pueden quedar semanas o meses. El mercado está muy tensado ahora, así que hacen falta medidas efectivas y casi instantáneas.
Por eso, la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha admitido hoy que el Gobierno prepara nuevas acciones. Se tratará de actuaciones que «probablemente» serán temporales, y aunque no lo ha especificado, todo apunta a una suspensión de impuestos.
No sería la primera vez que el Gobierno de Sánchez hace algo así. En 2018, cuando accedió al Ejecutivo, Teresa Ribera ya ordenó la suspensión de algunos tributos durante seis meses para rebajar la tensión del mercado.
El Gobierno ya suspendió impuestos a la luz en 2018
De hecho, hoy no ha especificado que impuestos se suspenderían, aunque ha admitido que «ya lo han hecho». Esto implicaría que el tributo a suspender sería el impuesto a la generación eléctrica, de 7%, que fue lo que pasó en 2018. También se desactivó el llamado 'céntimo verde' para combustibles destinados a la generación eléctrica.
Según la ministra, el Gobierno «no descarta» suspender «algunos de los elementos fiscales, con carácter excepcional y provisional». Sus palabras contradicen la postura de Ejecutivo hace un mes, cuando rechazaban directamente medidas de este tipo. El PSOE rechazó en el Congreso eliminar los impuestos a la luz que el PP presentó.
De momento, y a falta de que se acaben aprobando estas medidas, el precio de la luz en España está disparado. El precio del 16 de junio será un 45% superior al mismo día del 2020. El motivo de estas subidas de precio es por el encarecimiento del precio del gas y del importe por las emisiones de CO2.
Para solucionar esto, el PP ha pedido eliminar el impuesto sobre el Valor de la Producción de Energía Eléctrica, del 7%. Curiosamente, este impuesto fue aprobado por el PP de Mariano Rajoy en 2012 para hacer frente a la deuda del Estado.
Ciudadanos, por su parte, exige que el impuesto que se baje sea el de IVA. En España, la factura eléctrica tiene un 21% de este impuesto, el porcentaje más alto de Europa. El partido de Arrimadas pide que se baje por lo menos hasta el 10%.
El combustible fósil lastra el precio del gas y del CO2
Teresa Ribera ha explicado que España depende demasiado de los combustibles fósiles. En 2018, cuando el PSOE entró en el Gobierno, el 25% de la electricidad provenía de esa fuente de energía. Tres años después, el porcentaje ha bajado hasta el 13%, pero sigue siendo insuficiente.
«Esos combustibles son los que marcan el precio que cae como una losa, aplica a toda Europa y de manera especialmente grave en el mercado ibérico», ha explicado. La ministra ha defendido también el cambio de tarifas puesto en marcha por el Gobierno hace solo unas semanas.
Apunta que supondrán un ahorro del 43% para la factura del español medio a medida que se avance en este sistema. Según sus palabras, este sistema es más justo y se adapta al consumo de cada usuario.
La ministra ha explicado que ahora mismo la luz es más barata en España que en otros países como Alemania o Francia. Pero algunas páginas de internet que hacen comparativas de precio del kWh dicen lo contrario.
En España, el precio medio del kilovatio hora de luz (kWh) es de 0,2228 €, según Preciogas.com. En Francia, es de 0,1422 €; en Reino Unido, de 0,1741 €; y en Portugal, de 0,2081 €. Solamente Alemania, con 0,2919 €, tiene la luz más cara que España según sus datos.