Leticia Sabater, de presentadora infantil a animadora de fiestas
La fama cuesta y sino, que se lo digan a Leticia Sabater.
Fue una de las presentadoras infantiles más populares en los años 90. Hizo famosa la frase 'con mucha marcha' gracias a sus programas Desayuna con alegría, A mediodía, alegría o Vivan los compis.
Antes había empezado como figurante del mítico programa Un, dos, tres... responda otra vez como figurante. Poco a poco se fue labrando una carrera en la televisión y aunque ya apuntaba maneras, se desató una vez los niños dejaron de hacerle caso.
Luego, Leticia empezó un intento de carrera musical y una metamorfosis, bisturí mediante, para luchar contra el paso de los años. El resultado, lejos de ser agradable, ha sido... aterrador.
Decenas de operaciones estéticas
Leticia Sabater no ha dudado en operarse para estar más guapa y en mostrar el proceso en televisión o en redes sociales. Las intervenciones a las que se ha sometido son incontables. Operaciones de pecho, pómulos, boca, ojos, trasero o abdominales.
También se ha estirado la cara, se ha quitado papada y se ha reconstruido el himen.
Lejos de mejorar su aspecto, su cara luce acartonada y algo deforme, por lo que se ha convertido en una mujer nada atractiva.
Luchar contra la edad no siempre es fácil. Leticia nació en 1966 por lo que está más cerca de los 60 años que de los 50. Su estrella se ha apagado y sus canciones y videoclips de la última etapa no logran que su carrera despegue de nuevo.
Hay que decir en su favor que su paso por los realities de Telecinco es positivo (ganó La casa fuerte junto a Yola Berrocal). También escritora de libros: podéis encontrar un libro juvenil titulado Lety La Horrible y El Internado Diabólico escrito por ella.