Si hay un día marcado en el calendario de los Mohedano, ese es el 1 de junio de 2006, cuando Rocío Jurado, la 'más grande' fallecía víctima de un cáncer de páncreas a los 62 años.
Un momento, que cambiaría para siempre a Rocío Carrasco, quien ha relatado en su documental la forma en la que sobrellevó la enfermedad y perdida de su madre.
«A mí me llamó y me dijo que llevaba días que no se encontraba bien y nos fuimos todos para Madrid. El médico nos dijo que tenía cáncer de páncreas y que el 80% de los enfermos no sobrevivían. Sentí miedo, terror», explicaba al respecto de la forma en la que se enteró de la triste noticia.
Poco después, la artista tomaba la decisión de desplazarse hasta Houston, siempre arropada por los suyos, para tratarse en una de las mejores clínicas.
«Esos días en Houston son terroríficos. Cada día pasaba una cosa nueva, cada día tenía algo diferente, más grave que lo anterior. Así estuvimos todo el tiempo que pasamos allí. Fue terrorífico. Como éramos muchos, pues hacíamos turnos de mañana, de tarde y de noche», explicaba acerca de una de las etapas más complicadas que atravesó la familia.
«Yo también quería estar con mi madre cuando estuviera despierta, no dormida. Y así estuvimos hasta que ella se quiso volver a España, nos pusieron a disposición un avión para que pudiera viajar en las condiciones médicas necesarias».
Con su vuelta a España, quedaba claro que Rocío ya sabía que el fin estaba cerca, por lo que decidió dejar todas las cuestiones relacionadas con los suyos muy bien atadas. Así, llamaba a su hija y a Fidel Albiac y casi les imploró que se casasen.
«Hasta ese momento yo no me moví de su lado. Un día, nos llamó a Fidel y a mí, se quedó mirándome, y me dijo: 'Rocío, ¿tú no te pensarás que yo me voy a morir sin dejarte casada con este, verdad?'»
Una petición que pillaba por sorpresa a la pareja. «Fidel le contestó: '¿Pero qué dices? Primero tienes que ponerte buena. Además, que no puedes tener menos talla que la novia, ¿dónde se ha visto eso?'»
Sin embargo, La Jurado insistía en que quería que su hija se casase de inmediato. «Llamo al padre Ángel, y lo celebramos aquí con José, tú y yo. Y nadie más. Así me quedo tranquila».
A pesar de que al final no llegaron a casarse, Carrasco contaba que para ella fue casi como si lo hubieran hecho, por lo especial que fue el momento.
«El 1 de junio pasó lo que pasó». Fue Amador Mohedano el encargado de comunicar la triste noticia a los medios. «A las cinco y cuarto ha dejado de respirar. Y deciros que ha muerto como ella quería, rodeada de los suyos, de su familia, de sus hijos, de sus hermanos».
Todos los diarios abrían con la noticia del fallecimiento de la artista tras dos años luchando contra una larga enfermedad. Un cáncer de páncreas que terminó ganándole la batalla y apagaba una de las voces más brillantes de nuestro país.
Aunque, lamentablemente, su fallecimiento también trajo consigo la ruptura familiar. Una brecha insalvable que ha alejado a Carrasco de gran parte de su familia materna, pero también de sus hijos. Un hecho del que culpa a Antonio David, aunque la opinión de los Mohedano es algo diferente, ya que ellos no dudan en arremeter contra la actual pareja de Rociíto, Fidel Albiac.
«Hay una mente que dirige todo esto y para mí Rocío es una marioneta. Cuando tienes una persona a tu lado, esa persona tiene que ayudarte y pensar en lo que le hace daño a su mujer», arremetía José Antonio, marido de Gloria Mohedano, contra su sobrina.