En plena pandemia del Covid-19, solo el fenómeno meteorológico bautizado como 'Filomena' ha logrado desbancar al virus en el encabezamiento de los informativos. No ha habido espacio noticiario que no haya abierto con los estragos que el paso de la borrasca ha causado en nuestro país, especialmente en Madrid, donde la nevada ha sido histórica llegando a paralizar por completo la capital.
Por mucho que las autoridades aconsejaran quedarse en casa para evitar accidentes, ha sido imposible que los ciudadanos cumplieran las recomendaciones ante el escenario que la nieve ha dejado. Desde el pasado viernes, hemos sido testigos de calles llenas de gente dispuesta a disfrutar de la nieve mientras inmortalizan el momento con cientos de fotos de paisajes insólitos en plena capital de España.
Emma García estalla en pleno directo
Decenas de reporteros se han trasladado hasta las zonas más míticas de Madrid para transmitir en directo la gran nevada provocada por la borrasca Filomena. Desde 'Viva la vida' también quisieron mostrar cómo se encontraba la conocida plaza de Callao a donde se trasladó el reportero José María Fernández.
Durante la conexión, pudimos ser testigos de la cantidad de nieve acumulada en la plaza y cómo un gran número de personas se había congregado para comenzar una batalla campal de bolas de nieve. Una situación que indignó sobremanera a Emma García que no dudó en mostrar su enfado ante la irresponsabilidad de los madrileños. Hay que recordar que al margen del riesgo de sufrir un accidente por el hielo acumulado, estamos en plena pandemia y mientras unos juegan a tirarse bolas, otros se juegan la vida por salvar a los enfermos que a diario llegan a los hospitales.
«Es una locura, ¿pero esto qué es? Me parece inadmisible. Estamos absolutamente indignados con estas imágenes. ¿No hay policía, protección u orden ahí? Estamos locos, es indignante» decía la presentadora ante las imágenes que estaba presenciando desde el plató de 'Viva la vida'. Durante la conexión, el reportero narraba lo que estaba viendo calificando la situación de «inadmisible».
«No se trata de una guerra de bolas, es que están cogiendo las vallas o subiéndose a quioscos. Bastante complicada es la situación que estamos viviendo por la borrasca Filomena y por la pandemia como para que estos insensatos, por no decir otra cosa, se pongan a tirarse bolas con hielo» continuaba quejándose Emma García.
«Este es gilipollas»
Como era de esperar en plena guerra de bolas de nieve, los participantes se percataron de que estaban siendo grabados y no dudaron en lanzar bolas al reportero y al cámara. En un momento dado se pudo apreciar como uno de los participantes de un bando incitaba al contrario a continuar con la batalla.
«Mira, este es gilipollas, de verdad te lo digo» estalló Emma García sin poder contener ya la indignación y el enfado ante lo que estaba presenciando. «Esta situación no es solo indignante, es realmente peligrosa. José María, estamos sufriendo por ti y por nuestro técnico» explicó la presentadora que hacía un llamamiento para que las fuerzas de seguridad tomaran cartas en el asunto.
«Hacemos un llamamiento desde aquí al orden, a las Fuerzas de Seguridad. Son imágenes en directo las que estamos emitiendo en 'Viva la vida'. Esta situación no es solo indignante, sino realmente irresponsable y peligrosa. Espero que el alcalde y la presidenta de la Comunidad de Madrid se coordinen y puedan solucionar esta situación que por lo que veo va a más» apuntó la presentadora.
Afortunadamente a los pocos minutos, una patrulla de la Policía Municipal llegó hasta la plaza de Callao para proceder a disuadir la batalla de bolas de nieve. Lo que comenzó como un inocente juego entre dos bandos, acabó caldeándose hasta el punto en que también comenzó a volar por los aires parte del mobiliario urbano. De ahí que Emma García temiera por la integridad de los compañeros desplazados al lugar.
Con la sola presencia de los agentes de seguridad, los cientos de jóvenes congregados en la plaza de Callao, sin mantener la distancia de seguridad ni las medidas pertinentes en materia de protección del coronavirus, se dispusieron a abandonar el lugar.