Diego ‘El Cigala’ ya está en la calle. El cantaor flamenco fue detenido en Madrid a mitad de semana por un supuesto delito de violencia de género. Tras pasar una noche en dependencias policiales, fue puesto en libertad sin cargos.
Las dos mujeres de su vida
La vida profesional de este artista internacional poco tiene que ver con la personal. Mientras en lo laboral al cantaor flamenco le ha ido estupendamente, en el terreno sentimental la vida se lo ha puesto difícil.
Hace seis años, ‘El Cigala’ tuvo que decirle adiós para siempre a su mujer Amparo. Con ella tuvo tres hijos y fue el gran amor de su vida. Una larga enfermedad se la llevó por delante.
Poco tiempo después de enviudar, el cantaor rehizo su vida junto a Dolores Méndez, a la que llaman cariñosamente ‘Kina’. Esta artista jerezana, sobrina de la Paquera de Jerez, tiene dos hijos en común con Diego, un niño y una niña.
Ha sido precisamente esta mujer la que acusaba esta semana al flamenco de malos tratos continuados. Fuentes del caso indicaron que ‘Kina’ acudió el lunes a las cinco y media de la tarde a la comisaría de Jerez. Allí relató el calvario que estaba viviendo junto a su pareja, no solo físico sino también psicológico.
Según sus declaraciones, lleva dos años viviendo un auténtico infierno junto a ‘El Cigala’. La pareja nunca llegó a casarse, pero se estaban separando. De hecho, hace meses que cada uno está haciendo su vida al margen del otro.
Los agentes de la Unidad Familiar y Mujer (Ufam) de Jerez dieron tal validez al relato de ‘Kina’ que comprobaron dónde se encontraba el cantaor flamenco para proceder a su detención. El artista vive a caballo entre la República Dominicana y España desde 2013. El Hotel Catalonia Atocha de Madrid fue testigo de su arresto el pasado miércoles.
Su ya expareja no relató ninguna paliza inmediatamente anterior a su denuncia que fuera la gota que colmó el vaso. No obstante, sabiendo que estaba en Madrid preparando la segunda parte de su gira ‘Indestructible’ decidió denunciarlo. Su objetivo era que las autoridades pudieran actuar contra él en territorio nacional.
A la calle sin cargos
Tras pasar una noche en el calabozo, Diego fue puesto a disposición del juzgado de Violencia contra la Mujer número 7 de la capital. El cantaor mantuvo su inocencia en todo momento y el juez lo dejó en libertad sin cargos.
Para el magistrado no había riesgo de fuga. Por ello se inhibió a favor de los magistrados de Jerez. Estos serán quienes decidirán si hay causa y decretan algún tipo de medida cautelar o directamente el caso queda sobreseído.
A su salida de las dependencias policiales, el flamenco hizo unas declaraciones poco afortunadas. «Me voy a cantar a Málaga. Esto es por ‘los dineros’. ¡Siempre quieren dinero las mujeres!», aseguró a la prensa que le esperaba en la calle.
Finalmente, su espectáculo en Nerja se vio cancelado para evitar posibles protestas tras ser denunciado por malos tratos.
Sus problemas judiciales
Lo cierto es que no es la primera vez que el artista tiene problemas con la justicia. En 2004, fue condenado por insultar gravemente a una azafata de avión. La llamó «guarra», además de otros improperios, durante un vuelo por un hecho banal.
El artista se empeñó en que le guardaran un traje en el guardarropa, pero estaba lleno. No quiso colocarlo en el habitáculo superior de la cabina y esto desencadenó el altercado con la azafata.
Además, no hace mucho también tuvo un problema de tráfico leve. El vehículo del cantaor flamenco colisionó con un coche fúnebre en la República Dominicana. Afortunadamente todas las partes salieron ilesas del accidente.