La historia de Anabel Pantoja y Omar Sánchez parecía un cuento de hadas. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce.
Desde un primer momento, la pareja tuvo que superar muchísimos obstáculos. Para empezar, la distancia, sin contar con lo que les ha costado pasar por el altar.
La pandemia, ausencias muy sonadas y dolorosas como la de su primo Kiko Rivera o su tía Isabel Pantoja o la erupción del volcán de la Palma.
Aunque, sin duda, el golpe más duro fue el fallecimiento de su abuela, Doña Ana, justo dos días antes del enlace. Algo que desembocaba en un auténtico drama familiar.
Sin embargo, Anabel y Omar supieron sobreponerse a todo, sabiendo lo que tenían encima. Y a principios de octubre se daban por fin el 'sí quiero' en una emotiva boda playera.
La novia, todavía muy afectada por la reciente pérdida de una de las personas más importantes de su vida, llegaba al altar entre lágrimas.
Y escuchaba de boca de sus seres queridos lo mucho que significa para ellos. En concreto, su prima Isa Pantoja le dedicaba unas preciosas palabras a falta del resto de miembros de la familia.
"Siempre has hecho muchas cosas por nosotros y has mediado para que la familia esté bien. También necesitabas un poco de nosotros porque te lo mereces. Yo estoy aquí para ti", le decía.
Unas palabras que su prima agradecía de corazón y tras las cuales se fundían en un emotivo abrazo.
En aquel momento, Anabel gritaba a los cuatro vientos el amor que sentía por su 'Negro'. Aunque, lo que muchos no sabíamos es que ella se había replanteado seriamente celebrar esa ceremonia.
Sin embargo, finalmente decía seguir adelante tras tenerlo todo organizado y pensando en los sueños y planes de futuro que tenía con su marido.
Anabel Pantoja estuvo a punto de cancelar su boda
"Es una fecha muy mala, pero yo quería estar aquí porque tú te lo mereces. Me quería casar en Sevilla hace dos años y no lo discutiste", le decía a Omar.
"No me voy a olvidar nunca de Sevilla ni de Triana, pero soy de aquí porque aquí me siento en paz. Me siento valorada", explicaba sobre la que se convertía en su segunda casa, Canarias.
"Es difícil lo que voy a decir: no sé lo que durará esto, que dure hasta siempre, pero me has hecho sentir la mujer más valorada, la más guapa, la que está más buena y la que más amas. Eso solo lo he sentido contigo. Eso solo he sentido por ti".
Unas declaraciones que ya vaticinaban el triste final que iba a tener la pareja. Ahora, tras confirmarse su ruptura apenas cuatro meses después del enlace, Anabel ha confesado sus verdaderos sentimientos.
"Hay un momento en el que me doy cuenta de que no avanzamos, que es cuando él ha vuelto de Supervivientes", explicaba la sobrina de Isabel Pantoja sobre el momento que marcaba un antes y un después entre ambos.
Desde un primer momento, ella se oponía a que Omar concursase en el reality. "A lo mejor la que no ha sabido estar a la altura he sido yo, veía todo muy dormido", reconocía.
"Yo estoy muy activa, moviéndome de un lado para otro. Quiero hacer cosas juntos, enfocarnos en nuestros proyectos, pero todo estaba muy parado".
Además, también decidía sincerarse sobre lo acontecido antes de la ceremonia. "Yo quería algo especial, pero íntimo, con dos amigos".
"Pero empezaron a sumarse, y de ahí pasamos de diez personas a un montón. Además, lejos de casa, yo quería casarme en Sevilla", le confesaba a Jorge Javier Vázquez.
"Eso sumado a los problemas que tuvimos, que no había manera y parecía misión imposible", recordaba también haciendo referencia a los baches que tuvieron que enfrentar para casarse.