La fama es efímera y hasta puede llegar a resultar agobiante. Eso es lo que debió pensar en su día David Castillo, el actor que interpretó a Jonathan en Aída. Tras este papel, por el que consiguió la popularidad y el reconocimiento, trató de alejarse del foco mediático.
Se decantó por una vida de perfil bajo, huyendo de los medios y del protagonismo que le había otorgado la televisión.
David Castillo hacía de hijo pequeño de la protagonista, un joven descarado y malote que consiguió ganarse el cariño del público. Creció prácticamente delante de las cámaras. Comenzó en la serie con apenas 13 años y finalizó su etapa allí con 22.
Tuvo ocasión de compartir espacio con actores como Paco León, Pepe Viyuela o Carmen Machi. En total fueron diez temporadas y 237 capítulos emitidos. Desde entonces, la vida de este joven se ha orientado a sus grandes pasiones: la poesía, la actuación y los viajes por el mundo.
Antes de aparecer en la producción de Telecinco ya había probado fortuna en Ana y los 7, Hospital Central y Una nueva vida. El paso por Aída resultó muy agotador, cómo él había admitido en alguna entrevista.
"Durante años no quise hacer más tele después de Aída. No me veía con fuerzas. Profesionalmente estaba muy cansado después de trabajar sin parar desde los 10 años", admitía en El País.
Además de la interpretación, en donde tuvieron que soportar rodajes maratonianos, también debían sacar tiempo para los estudios.
Centró gran parte de sus esfuerzos en el teatro. Fue escogido para entrar en la Joven Compañía Nacional de Teatro Clásico. Allí interpretaría Pedro de Urdemalas y Préstame tus palabras 2.
Explicaba que era algo nuevo para él, acostumbrado "al teatro contemporáneo".
En esa etapa también sorprendió a los espectadores. Después de un tiempo alejado de los medios reaparecía en Pasapalabra como invitado. Y lo hacía con un estilo hipster, con larga melena rizada, gafas y barba.
El joven actor también se implicó en el corto Vida en Marte, en 2016, y en la miniserie de TelecincoLos nuestros 2. No hay que pasar por alto su papel en Amar es para siempre. Participó en 11 capítulos, entre diciembre de 2018 y marzo de 2019.
Uno de los últimos proyectos en televisión de David Castillo fue Besos al aire, que se estrenó en Disney+ el pasado marzo.
David Castillo y sus aficiones
David Castillo tiene claro que solo se volcará en aquellos proyectos que realmente le apasionen. En las redes sociales muestra otra de sus grandes pasiones, los viajes. Ha compartido en Instagram recuerdos de sus estancias en Noruega, Estonia o Cuba.
También reconoce ser un gran aficionado a la poesía, donde deja evidente su sensibilidad. A través de las líneas consigue transmitir un gran puñado de sentimientos y emociones. La música fue otra de las debilidades del joven, que llegó a interesarse durante una época por ser DJ.
Pero, sin lugar a dudas, la mayor preocupación de David Castillo es su hermano Javier. Tiene síndrome de Down y siempre que puede trata de ayudarle en todo lo que necesita. Es frecuente que suba a las redes sociales imágenes de los dos juntos.
Colabora con distintas organizaciones sin ánimo de lucro que pretenden crear conciencia sobre esta enfermedad. David está muy comprometido con este tipo de causas.
Tiene muy claro hacia dónde quiere orientar su vida y el futuro. Solo escoge aquellos trabajos que le agradan y que le hacen ser feliz. Todo ello sin perder de vista a sus otras pasiones, coma la poesía, la música o los viajes.
David Castillo había conseguido con su madurez y su personalidad ganarse el cariño de sus compañeros de reparto. Siempre hablaban maravillas del pequeño Jonathan.