Los últimos meses no han sido fáciles para Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz. La pareja ha atravesado por una mala racha, que ahora parece haber terminado. La colaboradora de televisión y el chef por fin han conseguido cumplir su sueño más inmediato.
Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz han vivido en primera persona lo peor del Covid-19. Aunque ninguno de los dos ha enfermado, sus finanzas se han visto afectadas.
El cierre temporal de ‘DiverXO’, el restaurante con el que el chef ha conseguido varias estrellas Michelín, se vio obligado a cerrar durante el confinamiento.
Cuando pudo volver a abrir sus puertas, este restaurante sufrió un aparatoso incidente con el incendio de su cocina. El matrimonio sacó de nuevo fuerzas y dos semanas después ‘DiverXO’ estaba lleno de comensales.
Cuando la situación parecía que iba a mejorar, el restaurante volvió a poner el cartel de cerrado. Varios miembros de su equipo dieron positivo en Covid-19 tras una prueba rutinaria.
Una preocupación menos
Todo esto sucedía mientras la pareja estaba inmersa en una mudanza. Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz decían así adiós al centro de Madrid y ponían el alquiler el que hasta entonces había sido su nidito de amor.
Ambos tenían claro que su piso no podía salir al mercado por poco dinero. La pareja colgó junto a las fotografías del inmueble en Internet el precio que pedían por él, 1.900 euros al mes. Esta cifra no es asequible para todos los bolsillos, por eso su alquiler ha tardado más de la cuenta.
Tras algo de más de un mes y medio, Pedroche y Muñoz han visto cumplido su sueño de encontrar inquilino.
Sus nuevos habitantes no solo podrán disfrutar de una de las zonas más en alza de la capital, el barrio de Embajadores, sino que tendrán los muebles del matrimonio, que ha decidido dejarlos para que la mudanza sea más sencilla.
La vivienda, que consta de 157 metros cuadrados y cuenta con materiales de lujo, ha visto como en los últimos cinco años la pareja ha sido de lo más feliz allí, pero ahora les toca comenzar una nueva etapa en Pozuelo de Alarcón, donde pueden respirar más tranquilos tras conocer que su piso esta alquilado y ya no supone un problema.